La huelga indefinida que desde hacía ya casi 12 días pesaba sobre la sociedad Limpieza Pública y Protección Ambiental (Lipasam), participada en solitario por el Ayuntamiento hispalense, ha acabado al fin al aprobar la asamblea de trabajadores la propuesta de acuerdo pergeñada entre la directiva, el Gobierno municipal y la representación de la plantilla. No obstante, los líderes de la plantilla, han advertido de que es necesario "lavar la imagen" de los trabajadores a cuenta de la campaña de "criminalización" promovida por el Gobierno municipal.
El paro técnico comenzó la noche del pasado domingo 27 de enero y se ha traducido en más de 7.000 toneladas de basura y residuos que esperan su recogida en las calles de Sevilla, donde la acumulación de detritos se percibe ya en el olfato.
LOS RECORTES
La convocatoria de esta huelga indefinida deriva de la pretensión inicial de Lipasam a la hora de reducir directamente un cinco por ciento el sueldo de los trabajadores y ampliar su jornada laboral a 37,5 horas semanales acumulando el exceso de horas en una bolsa a compensar con jornadas laborales en fechas como Semana Santa, la Feria de Abril o la Navidad. Cabe recordar, al respecto, que en abril de 2012, la dirección y el comité de empresa de Lipasam pactaron una reducción del cinco por ciento en los gastos de personal y una ampliación de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, para desconvocar la huelga promovida entonces en el marco de la negociación del nuevo convenio colectivo.
El punto de fricción residía en que el comité de empresa reclamaba atenuar la reducción salarial merced al ahorro de costes ya cosechado por la empresa y se oponía a que la ampliación de la jornada laboral repercutiese en los descansos programados en Semana Santa, la Feria de Abril o la Navidad, extremo que según los sindicatos afectaría especialmente a las contrataciones eventuales que Lipasam promueve en estas fechas para que sus servicios se atengan al incremento de la demanda y los descansos de los empleados.
SEGUNDA ASAMBLEA Y VOTACION REPETIDA
Finalmente, y a punto de entrar en su duodécima jornada, la huelga ha sido desconvocada al haber aprobado la asamblea de trabajadores, por 846 votos a favor, 135 en contra, siete en blanco y dos nulos, la mencionada propuesta de acuerdo, la misma por cierto que la propia asamblea rechazó la mañana del miércoles. La votación, repetida sobre la marcha al ser detectada una incidencia en cuanto a la recogida de los votos y tras algún cambio de ubicación de las urnas, no ha estado exenta de gestos de toda índole entre los trabajadores.
Esta propuesta de acuerdo, según el documento recogido por Europa Press, contempla un cómputo "semanal" de la ampliación de la jornada laboral a 37,5 horas semanales y una reducción del cinco por ciento en los "gastos de personal" mediante la eliminación de la bolsa de absentismo, la supresión de la compensación por exceso o defecto de horas anuales y una reducción directa del "3,6 por ciento en todos los conceptos salariales". Igualmente, y entre otras cosas, la propuesta contempla una "nueva bolsa de trabajo" para las contrataciones eventuales en función de los principios de "publicidad, igualdad, mérito y capacidad", fijando para ello un baremo "público y oficial".
INTENTO DE "SABOTAJE"
"Con la cabeza más fría y en otro foro diferente al de la empresa, se ha reconducido la situación", ha manifestado al término de la asamblea Antonio Bazo (CCOO), portavoz del comité de empresa. Pero además, ha censurado la actuación de "algún energúmeno que ha echado más votos de la cuenta" y otros miembros de la mesa de la asamblea han hablado de un intento de "sabotaje" de la asamblea.
Y es que la decisión inicial de la asamblea de trabajadores para rechazar la propuesta de acuerdo negociada por el comité de empresa causó sorpresa incluso entre los líderes de la plantilla. En ese sentido, Bazo ha destacado que en esta asamblea han participado, claramente, más de mil trabajadores frente a los "300 ó 350" que se posicionaron en la primera ocasión. "Tampoco es tan mal acuerdo", ha enfatizado.
"LAVAR LA IMAGEN" DE LA EMPRESA
Bazo, así, ha pedido "disculpas" a la ciudadanía ante los efectos del paro técnico y ha llamado a los trabajadores a colaborar en la necesidad de "lavar la imagen" de la plantilla, porque como ha enfatizado José Luis González, antaño presidente del comité de empresa y miembro de la mesa de la asamblea, "el Ayuntamiento está criminalizando a quienes ganan más de 700 euros" y "provocando constantemente" a la plantilla de esta empresa pública. Así, Bazo y el resto de líderes de los trabajadores han acusado al Ayuntamiento de enconar el conflicto al no atenerse a la negociación y promover continuas "provocaciones".
