El mundo flamenco se dio cita en El Punto, donde tuvo lugar un entrañable acto de inauguración, impulsado por la tertulia de flamenco y temas gitanos de Utrera, como broche de oro a su segundo ciclo cultural. El monumento, que representa el logotipo del festival organizado en 1988, está acompañado por el nombre de todas las personas que formaron parte del mismo, algunos de ellos -la mayoría- aficionados al flamenco y otros -los menos- artistas profesionales.
Los asistentes recordaron a las personas ya fallecidas y destacaron el carácter benéfico de un espectáculo "inolvidable". El alcalde, Francisco Jiménez (PA), cerró la inauguración con palabras de marcado orgullo utrerano: "Es un lujo vivir en Utrera y tener a los gitanos de Utrera, porque hacer un cartel como el que se hizo gracias a mucha gente sencilla es algo que sólo es posible en muy pocos sitios".