Es un fenómeno en la red; sus vídeos han registrado más de quince millones de descargas en Youtube y ha conseguido involucrar a artistas de la talla de Alejandro Sanz y Raphael.
Pero desde anoche, Playing for change es también el evento musical que hizo vibrar a la isla de la Cartuja en un concierto para recordar. Fue El Fuerte de Isla Mágica el lugar escogido en el que Kiko Veneno y Pitingo, dos chamanes con dejes flamencos, ejercieron de maestros de ceremonias en el primer concierto en España del movimiento Playing for change, un proyecto multimedia que pretende conectar el mundo a través de la música.
Se trata de una banda formada por artistas callejeros de 15 países diferentes que demuestra que la música puede derribar las barreras culturales, religiosas y políticas a pesar de las fronteras.
La de ayer fue una iniciativa de la empresa social Además Proyectos Solidarios y Acciona para llenar Sevilla de músicos callejeros provenientes de los cinco continentes, que, antes de viajar a Madrid el próximo jueves, tocaron ayer juntos en Sevilla sobre el mismo escenario.
Pudimos contar hasta 30 artistas que pasaron por un Fuerte de Isla Mágica que no paró de vibrar desde el inicio del recital y que vivió sus momentos álgidos con las estrellas invitadas, Veneno y Pitingo, que le pusieron compás a una noche de música y solidaridad.
Y es que los beneficios que se recaudaron anoche serán destinados, por una parte, a colaborar en la financiación de las carreras musicales de los artistas callejeros invitados, y por otra, a la construcción de escuelas musicales en Mali (África) y Nepal (Asia).
Hace unos 10 años, el productor americano Mark Johnson creó un estudio de grabación móvil para recorrer el mundo buscando músicos callejeros con los que grabó una versión de la mítica canción Stand by me, de Ben E. King. Después, gracias a la tecnología, editó un vídeo de la canción con fragmentos de cada uno de los músicos en una parte del mundo.
Actualmente, este vídeo ha registrado más de quince millones de descargas en Youtube. Tras este primer éxito, Johnson decidió crear la Fundación Playing For Change con la que se retribuye económicamente a los artistas callejeros que colaboran con el movimiento.
Además, gracias a la Fundación se destinan fondos para la creación y mantenimiento de varias escuelas de música en países como India, Nepal, Ghana o Suráfrica, entre otros.
Algunos de los principales artistas de nuestro país como Alejandro Sanz, Amaia Montero, Macaco, Kiko Veneno, Raphael, Rosario Flores, Pitingo o Antonio Carmona se han involucrado muy estrechamente en este proyecto.