El consejo de administración ha ratificado a Jordi Maymó como gerente, en una asamblea en la que Maymó ha justificado toda su actuación y ha insistido en que volvería a actuar de la misma manera.
Maymó puso su cargo a disposición del consejo al saltar a la luz pública una grabación en la que proponía la posibilidad de rebajar el precio del traspaso de dos tercios de un puesto, con tal de que la empresa siga llevándose el 30% de la operación. Tras ello, obtuvo el respaldo del Gobierno local a través de su portavoz, Maribel Montaño, pero el director ha dejado muy claro que si hay dudas sobre su continuidad o sobre su actuación dejará el cargo. Si el consejo no lo ratifica, Maymó se marchará sin haber cumplido ni medio año al frente de Mercasevilla.
También ha negado hoy ante el consejo de administración de esta empresa participada por el Ayuntamiento hispalense y Mercasa, que indujese un falseamiento de cifras en la operación de compraventa de dos sextas partes de un puesto del mercado. De hecho, ha reclamado al comprador que "declare" las cuantías pagadas conforme a la negociación cuya grabación, en soporte digital, tachó nuevamente de "deleznable", sobre todo porque ha conducido a una "rotura de confianza" en el seno de la empresa.
Maymó compareció hoy ante los medios de comunicación justo tras la reunión extraordinaria celebrada por el consejo de administración a cuenta del mencionado caso; una grabación hecha pública por la Asociación de Mayoristas de Pescado en la que Maymó, supuestamente, proponía rebajar el precio de una operación de compraventa de dos sextas partes de un puesto del mercado de mayoristas para reducir el canon del 30 por ciento gravado por Mercasa para este tipo de traspasos. La operación, según los mayoristas de pescado, se consumó por 50.000 euros pese a que en el contrato figurase la cifra de 20.000 euros como precio definitivo y Mercasevilla cobrase un canon de sólo 6.000 euros según lo estipulado en la documentación, que según los mayoristas no reflejaría la realidad de la compraventa por designios del propio Maymó. RESPALDADO POR EL CONSEJO En su breve comparecencia, Jordi Maymó explicó que se ha sentido "absolutamente" respaldado por el consejo de administración, ante el cual ha negado que hubiera "inducido" a las partes involucradas en la citada operación a falsear la "realidad" de la compraventa de dos sextas partes de este puesto. En concreto, la operación estaba protagonizada por un mayorista de pescado que posee una sexta parte de este puesto y, gracias a la transacción, se ha hecho con la mitad del puesto.
El director general de Mercasevilla explicó que se limitó a "facilitar" el mencionado traspaso y que la "intención" de la directiva de Mercasevilla es "unificar" los puestos para propiciar la prosperidad del comercio en este mercado de mayoristas. En ese sentido, se escudó en que como responsable de la empresa se aseguró de "aplicar" el canon del 30 por ciento estipulado para este tipo de operaciones y, en ese sentido, aseguró que ha reclamado al comprador que "declare" cuánto dinero ha pagado por estas dos sextas partes del puesto, dado que este empresario asegura que la operación se consumó por 50.000 euros y no por los 20.000 euros que rezan en el contrato de compraventa.
Al respecto, recordó que durante la negociación, el propio comprador había supeditado su participación en la operación a que el precio de las dos sextas partes del puesto se fijase en 20.000 euros. "Dijo que sólo compraría si lo hacía por 20.000 euros", dado que afrontar la compra por 50.000 euros implicaba un canon de 15.000 euros.
LA CUESTION DEL CANON
En ese sentido, Maymó explicó que este canon "siempre se ha pagado" en este tipo de operaciones y que desconoce si el anterior director general, Fernando Mellet, omitía la imposición del canon a la hora de tramitar operaciones entre los propios mayoristas del mercado. La federación de empresarios de Mercasevilla y el propio protagonista de la compraventa, de otro lado, alegan que desde 2004 existía un acuerdo "tácito" entre los agentes de Mercasevilla, gracias al cual dicho canon era ignorado cuando la operación se realizaba entre mayoristas del mercado. Es por eso que consideró que entre los empresarios existe un "cierto interés" en convencerle de la realización de prácticas como esta, pero aseguró que desde la directiva de Mercasevilla "nunca" se ha inducido a falsear la realidad de las operaciones y sólo se ha intentado "llegar a acuerdos en los traspasos" de los puestos de venta. En cuanto a sus manifestaciones públicas en las que tachaba de "mafia" a la Asociación de Mayoristas de Pescado, se disculpó por sus descalificaciones asegurando que ha atacado "a las prácticas, no a las personas", pues insistió a la hora de tachar de "deleznable" e "inaceptable" la grabación de la negociación sin su consentimiento, un caso que ha supuesto una "rotura de confianza" entre la directiva y los mayoristas. No obstante, dijo estar dispuesto a "suturar" las heridas ocasionadas por este asunto. Finalmente, Jordi Maymó alegó que su cargo "siempre" está a disposición de la Presidencia de Mercasevilla, ostentada por el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), pero enfatizó su interés por trabajar por el "futuro" de Mercasevilla transformando, eso sí, "sus sistemas de gestión".