Uno de los jóvenes acogidos al plan de empleo de la Junta recogiendo los restos de botellones en la orilla del río. / El Correo
Nueva polémica en torno al Plan de Empleo Joven, a cuenta de que se haya encargado a algunos de sus beneficiarios limpiar la zona ribereña del río que este lunes amaneció plagada de restos de botellones. Este programa, puesto en marcha por la Junta con financiación europea, pretende fomentar la contratación de personas de 18 a 29 años, para lo que ponía a disposición de los ayuntamientos 200 millones, de los que el gobierno municipal percibiría diez.
El decreto que regula este plan imponía unas condiciones, entre ellas, la recogida en el artículo 17.2 C, que establece que los jóvenes tenían que desempeñar «actuaciones distintas de las realizadas regularmente por el personal de estructura de la entidad solicitante, incluidos los supuestos en que la relación de dicho personal estuviera sujeta al derecho laboral». Esto supondría que no se puede suplir la tarea de los empleados de Lipasam, por ejemplo. En este punto se abre el debate. Mientras el PSOE considera una «vergüenza» que se use a este personal para estas labores, para el consistorio es algo legal, ya que se trata sólo de un «apoyo o refuerzo» y considera que no puede encargar a estos jóvenes tareas ajenas a las competencias locales. La norma también impedía que los beneficiarios trabajaran a las órdenes de empresas adjudicatarias de servicios públicos: «La ejecución de la obra o prestación del servicio (...) se realizará en régimen de administración directa» indicaba el artículo 17.2. B, lo que afectaría también a la conservación de parques y jardines, de la que se encargan subcontratas.
El concejal socialista JuanCarlos Cabrera criticó ayer que «el gobierno de Juan Ignacio Zoido haya transformado una oportunidad laboral para más de mil jóvenes en frustración». «No sólo no ha hecho nada por complementar estos planes, sino que ha mostrado un absoluto desinterés por su planificación», dijo.
«Estos jóvenes tenían la oportunidad de trabajar para el consistorio en funciones de acuerdo a su formación, para mejorar su perfil profesional y adquirir nuevas competencias. Pero el PP se dedica a utilizarlos para recoger los restos de botellón en el río todas las mañanas. Una vergüenza», insistió.
A su juicio, recoger restos de la movida, «un trabajo asignado a personal municipal o a empresas adjudicatarias», no permite «que los jóvenes adquirieran una experiencia profesional», que era uno de los objetivos de plan.
Desde el Ayuntamiento replicaron que aunque no les consta el caso concreto del río, sí se ha encomendado a algunos de estos jóvenes la conservación y limpieza de parques y colegios y la retirada de naranjas en la calle, pero siempre como una labor «complementaria o de refuerzo, nunca de sustitución, y compatible con el decreto». Además, precisa que el Ayuntamiento «no puede realizar trabajos fuera de su ámbito competencial».
«En ningún caso se suplen los trabajos que habitualmente se realizan con personal de plantilla del Ayuntamiento, ni mucho menos cubren vacantes o bajas de la plantilla. Son tareas diferenciadas, que se desarrollan separadamente y que cuentan con mandos obreros o personal técnico de dirección de los trabajos contratados con cargo a los mismos planes de empleo, aunque bajo la supervisión de los responsables de cada proyecto en los diferentes servicios municipales», añadieron.
Además, desde el consistorio aseguran que hace una semana hubo una reunión de seguimiento de este plan con sindicatos donde «sólo UGT puso pegas». «Que diga el PSOE qué haría con este plan», zanjó un portavoz municipal, que recordó que la Junta aún no ha transferido la financiación.
El edil socialista criticó también el aspecto que presentaba la orilla del río ayer por la mañana. «Se demuestra que hay un grave problema de botellonas en la ciudad y que sigue sin tener respuesta alguna por parte del gobierno. Y en zonas como el río, el entorno de las Naves del Barranco y Arjona el conflicto se está agravando», concluyó.
