El último episodio, los fraudes detectados durante la Feria, ha vuelto a dejar en evidencia las carencias de la regulación del sector del taxi en Sevilla, ya cuestionada por situaciones como los conflictos surgidos con los hoteles, la ausencia de vehículos por las noches, la falta de consensos en el seno del Instituto del Taxi o el retraso en la puesta en marcha de la emisora municipal única.
Ante los nuevos hechos, el delegado de Movilidad, Francisco Fernández, retomó ayer un anuncio que ya ha realizado en repetidas ocasiones: el inicio del proceso para la revisión integral de la normativa local, que data de los años 80. El equipo de Gobierno asegura ahora que estará lista antes de fin de año. Pero este reglamento depende, a su vez, del marco autonómico cuya revisión debe aún superar varios trámites.
"Iniciaremos un proceso de participación de todos los agentes implicados para elaborar una normativa que ponga fin a los desmanes de una parte del sector, que han supuesto en ocasiones fraudes sustanciales. Esta ordenanza debe resolver las necesidades del sector, de los ciudadanos, los turistas y los hoteles". explicó el delegado de Movilidad, quien eludió precisar el motivo del retraso que ha acumulado este proceso. "Nunca es tarde si la dicha es buena", se limitó a contestar.
Unión Sevillana del Taxi, la entidad mayoritaria, comparte esta intención de modificar la regulación del sector, siempre y cuando "el proceso se lleve a cabo definitivamente", en palabras del presidente de la entidad, Fernando Morales. Pese a esto, todo proceso municipal depende de los acuerdos que se adopten en el marco autonómico. Los taxistas de toda Andalucía están reunidos durante este fin de semana en Almería para definir su modelo de regulación del sector.
