El convenio colectivo de los trabajadores municipales de Palomares del Río ha desatado entre el grupo popular y el euipo de Gobierno un cruce de acusaciones. Pese a que los trabajadores está amparados bajo el convenio anterior, que todavía está vigente hasta que no se firme el nuevo, la portavoz popular, Lola Rodríguez, criticó ayer a la alcaldesa de la localidad, Juana Caballero, porque «está presionando a los 64 trabajadores para no aprobar el convenio colectivo con un escrito en el que culpa a los populares de que estén sin convenio». Sin embargo, la primer edil asegura que, a día de hoy, los trabajadores municipales se rigen por el convenio colectivo anterior, «ya que está vigente hasta que no se apruebe el convenio», que hasta principios de esta semana estaban valorando los técnicos. Aunque el Ayuntamiento tenía abierta una mesa de negociación con los 64 trabajadores, Caballero indica que rompieron la dinámica de diálogo «en el momento en que ejercieron su derecho y emprendieron acciones de protesta». Y es que mientras que los habilitadores nacionales valoraban el nuevo documento, los trabajadores optaron a principios de junio por mostrar su rechazo ante la tardanza del nuevo convenio protestando en la puerta del Ayuntamiento. Se empezó a trabajar en el nuevo documento cuando gobernaban los populares y, según Rodríguez, «el convenio quedó prácticamente ultimado»; sin embargo, Caballero sostiene que desde diciembre hasta febrero «ha estado guardado en un cajón» y que el preacuerdo que existía entre trabajadores y Ayuntamiento estaba pendiente de legalidad. Además, la alcaldesa asegura que se enteró de que se había elaborado un nuevo convenio cuando en un Pleno los populares pidieron agilizar el proceso de aprobación. De hecho, PSOE, IU y UIPR recharazaron la propuesta del PP durante dicho Pleno. Según la portavoz del PP, la prórroga del anterior convenio finalizaba en marzo. No obstante, la alcaldesa insiste en que «sigue vigente hasta que no se apruebe el nuevo convenio». Hasta ahora, el nuevo estaba en proceso de valoración, ya que los técnicos tenían que determinar si se ajustaba a la Reforma Laboral «que la tenemos que acatar aunque desde Izquierda Unida y el equipo de Gobierno no la apoyemos», expone Caballero. Los populares también critican a la alcaldesa por tardar 30 días «en sentarse con los trabajadores» y aseguran que la regidora ha recibido los informe pertinentes al convenio entre los meses de abril y mayo. Por ello, desde el grupo popular sostienen que «no es el PP quien deja expedientes o documentos enterrados en cajones, ni quien utiliza, como hace el actual equipo de gobierno medios municipales de forma partidista y para criticar al Ejecutivo de Rajoy». Rodríguez también que durante la etapa en la que gobernaba el PP, antes de la moción de censura, dejara de pagar mensualidades a los trabajadores municipales.
