El menor condenado a 3 años por encubrimiento en el caso Marta del Castillo, Javier García alias El Cuco, cumplirá condena hasta marzo de 2013, según el auto del juzgado de menores número 3 de Sevilla que determina que cada tres de los 565 días que pasó en un piso tutelado computen como uno en régimen cerrado.
Por tanto, contarían como 188,3 días que se suman a los nueve meses que pasó en un centro de internamiento, por lo que le quedarían 592 días, (la condena es a 2 años y 11 meses de internamiento y el último mes en libertad vigilada) es decir, un año, siete meses y 17 días, de los que desde que fue condenado en firme en octubre, ya lleva dos meses en un centro de menores. Por tanto, le quedan un año, cinco meses y 17 días que se cumplirían a mediados de junio de 2013.
Pero durante el tiempo en el que estuvo en el piso tutelado, El Cuco también debía cumplir en todas sus salidas una orden de alejamiento que le impedía acercarse a 50 metros de la familia de Marta y comunicarse con ellos, una restricción de derechos que el juez considera ahora que también debe computar a razón de que seis días de esta medida le cuenten como uno internado, por lo que habría que restar otros 95 días. Así que la salida del Cuco se adelantaría a marzo de 2013.
La decisión del juez se queda a medio camino entre la petición de la defensa, que solicitaba que cada día en el piso tutelado contara como uno en régimen cerrado, y la de la Fiscalía y la familia de Marta, que pedían que se computarán a razón de seis y cuatro días respectivamente. El auto señala que el tiempo en el piso tutelado no puede equivaler a un internamiento ni tampoco a una medida de libertad vigilada. Y que el hecho de que se hayan cumplido o no los objetivos educativos o psicológicos propuestos cuando se dictó esa medida no son determinantes a la hora de realizar la compensación legalmente prevista para las medidas cautelares con respecto a las penas firmes.
Precisamente, la Fiscalía pide ahora 18 meses por el quebrantamiento de esta medida cuando estando en el piso tutelado viajó a Sevilla con sus padres para ir a cumpleaños y se acercó a menos de 50 kilómetros, según los padres, porque se equivocaron de carretera. El auto critica un informe técnico "sesgado" aportado que da por hecho el quebrantamiento sin respetar la presunción de inocencia, ya que este hecho aún no ha sido juzgado.
