"Si ya no se pueden encontrar vestigios, si son ya cuatro restos. Por Dios, digan ya dónde está y dejen a su familia descansar y que tengan un lugar donde poder recordarla", imploró ayer al abogado de los padres, José María Calero, a los cuatro acusados con la mirada fija en ellos. No sólo lo hizo una vez, sino varias veces a lo largo de su informe, en el que también mantuvo la acusación contra Miguel Carcaño por asesinato y violación. El fiscal también pidió a los cuatro que, "aunque sea con un anónimo", alivien "el sufrimiento de la familia".
Precisamente hoy será la última oportunidad de que alguno de ellos diga dónde esté el cuerpo de Marta, haciendo uso del turno de su última palabra. Por eso ayer, el fiscal comenzó su informe apelando a la "conciencia más íntima" de los cuatro y pidió que "en un último acto de hombría" digan dónde está el cuerpo de Marta "aunque sea con un anónimo". Además, dijo que "no comprende" cómo pueden seguir "tan fríos" tras haber escuchado en la sala y "haber tenido tan cerca" el sufrimiento de la familia y de los amigos de Marta.
La acusación particular también trato de ablandar el corazón de los acusados en un intento desesperado. "Por Dios, expliquen de una vez dónde está el cuerpo de Marta para que los padres descansen. Que no tengan que estar con la incertidumbre de que mañana podáis decir otra cosa sobre su paradero. Viven en una continua intranquilidad. Por vuestra propia conciencia", dijo clavando su mirada en los cuatro, en especial en Carcaño, sin que obtuviera ningún tipo de reacción de ninguno. Nada, salvo un gesto de María, la única que le mantuvo la mirada, que no paró de tocarse su cabello alisado. "Lo que hicieron con el cadáver sólo lo saben ellos hasta que tengan la bondad o la decisión de contárnoslo", incidió de nuevo el abogado al final de su informe.
El letrado calificó el caso de "excepcional" y "difícil" en gran parte por "la frialdad de los acusados. Porque hemos visto que con la arrogancia que Samuel le dice a Miguel que diga dónde está Marta le contesta Miguel". Una dificultad que a su juicio se ve también acrecentada por el "doble enjuiciamiento", que a su juicio y del fiscal, no impide que Carcaño, a diferencia del Cuco, sea condenado por violación.
Calero, que destacó especialmente el papel de "cerebro" de Javier Delgado al ser el que dirigió a los otros cuatro, pidió al tribunal "una sentencia que permita a la familia cerrar este capítulo", un fallo "de sentido común y que castigue el silencio arrogante y permanente de estas personas", ya que a su juicio, "ellos plantearon un reto a la Justicia, una macabra partida de ajedrez".
