La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, inauguró ayer el curso escolar 2014-2015 en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) haciendo una promesa: en los próximos presupuestos se va a «blindar» la educación pública, porque es «el motor de Andalucía» y porque es el «pilar fundamental de la igualdad de posibilidades».
Un anuncio que puede ser más un deseo que una realidad por las diferencias que están escenificando en los últimos días los socios del Gobierno andaluz, PSOE e IU. El último episodio sobre las difíciles relaciones entre las dos formaciones se vivió ayer, cuando la portavoz adjunta del grupo parlamentario de IU, Alba Doblas, volvió a repetir, tal y como lo hizo hace unos día el coodinador de su formación en Andalucía, Antonio Maíllo, que IU no apoyará los presupuestos si antes no se ha aprobado una anteproyecto de banca pública. Una reclamación que el PSOE no comparte. El martes el portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, desvinculó una cosa de otra y ayer lo volvió a repetir el portavoz socialista en el Parlamento, Mario Jiménez.
Doblas explicó que su insistencia en contar en breve con el anteproyecto de una banca pública se debe a que el Parlamento ya cuenta con el dictamen del grupo de trabajo sobre la creación del instituto de crédito público andaluz, que además fue aprobado por los socios de gobierno en la Cámara. Insistió que es «posible» la aprobación de este anteproyecto antes de elaborar las cuentas del próximo año.
Asimismo, indicó que el nuevo modelo productivo andaluz está ligado a la banca pública, porque este instrumento se hace necesario para apoyar a las pequeñas y medianas empresas y a los autónomos ante las dificultades que tienen para acceder al crédito: «Porque la banca privada ni está ni se la espera», denunció. La portavoz adjunta de IU en el Parlamento recordó, además, que en el dictamen del grupo de trabajo se recogía que se incluyeran 3,6 millones de euros para la banca pública en los próximos presupuestos.
Esta perseverancia de Doblas en vincular la aprobación del anteproyecto de banca pública a su apoyo al presupuesto, provocó que el portavoz del PSOE en el Parlamento sugiriese a sus socios de gobierno que trabajen por reclamar a Madrid que pague a Andalucía lo que le adeuda.
DIFICULTAD. Jiménez admitió que el escenario para sacar adelante las cuentas es «muy complicado» y advirtió que «no vale» cualquier presupuesto, pero indicó que lo primero que hay que conocer para poder elaborarlo es «saber los ingresos» que se tendrán. Recordó que el Ejecutivo central ha recortado las transferencias para el próximo año en 600 millones, a lo que unió que el Gobierno de Mariano Rajoy adeuda a Andalucía 6.000 millones de euros. Ante esta situación, el portavoz del PSOE en el Parlamento reiteró a IU que exija a Madrid el dinero que debe a los andaluces para poder cuadrar los presupuestos, «porque lo primero para poder elaborarlo es conocer los ingresos que se tendrán».
El socialista denunció que el PP con sus políticas de recortes busca que se toque el Estado del Bienestar, pero remarcó que el compromiso de la presidenta de la Junta es luchar porque haya fondos suficientes para afrontar la recuperación económica, crear empleo y preservar los servicios públicos de calidad.
Respecto a la aprobación del anteproyecto de ley de la banca pública, Jiménez manifestó que forma parte del acuerdo suscrito entre los socios de gobierno de coalición, que ha sido objeto de un profundo debate en el Parlamento, por lo que indicó que estará en los próximos meses. Afirmó, incluso, que este asunto no genera ningún «tipo de conflicto» entre los socios del Ejecutivo andaluz.
