El Defensor del Pueblo, José Chamizo, ha mostrado su satisfacción por el carácter "muy acogedor" y por el trato familiar que reciben los menores del centro La Granja II, unas instalaciones gestionadas por Paz y Bien que se ubican en esta localidad.
Un total de ocho menores de 18 años encuentran cobijo temporal en este Centro de Acogida de Alcalá de Guadaíra. A primera vista se nota que se encuentran muy bien aunque todos son conscientes de que ese agradable local es apenas el primer paso en su intento para cumplir su sueño de iniciar una nueva vida.
Los chicos viven en un edificio que en otros tiempos fue un chalet, "cada uno tiene su propia habitación y debe responsabilizarse de ella" asegura Benito Romero coordinador de menores del centro.
"No se respira un ambiente de apatía" explica Romero. Hay vida en esa residencia, de hecho los cuidadores se ocupan mucho de que los jóvenes se sientan como en casa dándoles una vida lo más familiar posible. "Podemos mostrarles un futuro mejor", explican. "Les damos las herramientas para ello". Al menos así tienen la posibilidad de mejorar sus oportunidades en la vida, sin importar dónde se encuentren en el futuro. Este es el caso de cuatro jóvenes que a principios de año ya pasaron desde este centro a un piso tutelado.
Probablemente el buen trato sea la base para que José Chamizo haya dicho de este centro que cuenta con un ambiente "familiar y hogareño" , "sorprende gratamente el trato familiar y cariñoso que los educadores dispensan a los menores", afirma el autor del texto, quien además añade que en él las actividades que se realizan son tareas propias de un hogar que tiene como modelo a la familia y que busca el bienestar y el desarrollo integral del menor.
Historias posibles. Cada uno de los jóvenes tiene su propia historia de vida pero todos tienen algo en común, su desamparo, Benito Romero indica que se pueden escuchar todo tipo de historias posibles. En ese sentido, los malos tratos, padres que no se preocupan por ellos o que simplemente no pueden manejarlos unidos a sus propios problemas de conducta están a la orden del día.
En La Granja II reciben un trato especial y también cuidados que no recibían es sus propias casas incluso se lleva a cabo un control dietético del menú por un profesional cualificado (nutricionista o médico) y se consumen productos que produce la entidad en sus instalaciones de la finca San Buenaventura -situada también en Alcalá de Guadaíra-.
De hecho los propios menores no dudan en afirmar que hay "muy buena relación con el personal, y se sienten "queridos en el centro".
Otro de los aspectos que se destaca en el informe del Defensor del Pueblo es que en La Granja II no se realizan registros personales y de los dormitorios por el personal educativo, ni se realizan rondas nocturnas de reconocimiento. También subraya que el centro no posee sala de contención y aislamiento.
La asociación Paz y Bien, fundada en 1979, centra su actividad en la atención y el acompañamiento de las personas con discapacidad intelectual. A partir de 1999 comienza a gestionar centros de menores en situación de desprotección. Concretamente la Granja II acoge a menores con discapacidad y con trastornos de conducta.
