Hermandad de Los Panaderos. / Victoria Hidalgo "Aquí no hay que crucificar a nadie. De todo lo sucedido hay que extraer conclusiones para aprender El delegado del Miércoles Santo, Mateo Domingo González Gago, terció ayer en la polémica surgida a raíz del conflicto de intereses vivido hace nueve días entre las hermandades de Los Panaderos y La Lanzada cuando la primera suspendió su estación de penitencia interfiriendo en el recorrido de la segunda: Tengo claro que no vamos a demonizar a nadie. Uno se puede equivocar y ya está, pero en este caso se ha sido especialmente cruel. Es posible que no salieran las cosas (dijo en referencia a los Panaderos), pero de lo que estoy seguro es que no ha habido en ningún momento mala intención. Mientras que yo esté de por medio, a las hermandades del Miércoles se les va a tratar con el máximo cariño. No entendería que se exigieran dimisiones. El Consejo no tiene atribuciones de ese tipo para poder actuar, añadió en declaraciones a este periódico el representante del Consejo de Cofradías en el Miércoles Santo, quien especificó que la institución recabará los informes de ambas cofradías en la reunión de incidencias que celebrarán las nueve hermandades de la jornada una vez pasada la Feria. La hermandad de los Panaderos, por su parte, hizo público ayer un comunicado de cuatro puntos en el que asume su error de entrar en Campana con marchas procesionales y solicita sinceras disculpas por lo ocurrido a la hermandad de la Sagrada Lanzada en todo aquello que pueda ser achacable a la hermandad del Prendimiento. No obstante admitido el error de acompañar con marchas el regreso a la capilla de sus pasos, también es cierto se apunta en el mismo comunicado que aunque lo hubiésemos hecho sin ellas, el tiempo de entrada de los pasos en la capilla hubiese sido el mismo, debido al corto recorrido que nos separa de nuestra capilla y a la falta de espacio dentro de ella a la hora de ubicar el cuerpo de nazarenos, y de la dificultad que nos encontramos para poder desalojar un cortejo con más de 1.200 personas, entre nazarenos, costaleros y bandas. La corporación de la calle Orfila niega oficialmente que hayan existido enfrentamientos entre ambas cofradías. No ha existido, ni existe, nada al respecto, cuestión comentada entre ambos hermanos mayores y negada por ambos, se dice, al tiempo que muestra su reprobación a los abucheos realizados por una mínima parte del publico, situado en la confrontación de la calle Orfila y Laraña. Más polémico resulta el cuarto y último punto del comunicado oficial, en el que se realiza una advertencia a los medios de comunicación: En relación a los comentarios vertidos por la prensa contra el proceder de nuestra hermandad, sin tener los datos concretos que motivaron tal circunstancia, dando juicios sin poseerlos y sin hacer una valoración certera y veraz de lo ocurrido, esta junta de gobierno estudiará convenientemente la forma de proceder, teniendo siempre en cuenta los intereses de nuestra corporación.