El dispositivo de seguridad para la final de la Copa del Rey que Athletic Club de Bilbao y Barcelona disputarán el miércoles en Mestalla contará con cerca de ochocientos agentes de Policía y se prolongará hasta el jueves, ya que ambos equipos pernoctarán en Valencia en la noche del partido.
Mientras el Athletic de Bilbao ha fijado su llegada para la jornada del domingo, el Barcelona tiene previsto desplazarse el mismo día del encuentro. El conjunto vasco trabajará estos días en un hotel a veinte kilómetros del estadio y el catalán ocupará a partir del miércoles un hotel junto al campo de Mestalla.
Según señalaron fuentes policiales, alrededor de seiscientos agentes se integrarán en el operativo del estadio y los doscientos restantes estarán en las zonas de las carpas habilitadas para los seguidores de ambos equipos, el aeropuerto, la estación de ferrocarril y los puntos de llegada de autobuses.
No existen datos exactos del número de autobuses que van a llegar, ya que muchos de ellos se han contratado al margen de los clubes, pero la llegada masiva de los aficionados está prevista para la misma jornada del partido, que dará comienzo a las 22.00 horas del miércoles.
Ambas aficiones accederán a la ciudad por la misma carretera y la previsión es que los aficionados del Athletic lleguen antes a Valencia puesto que el trayecto desde Bilbao es más largo que desde Barcelona.
Por ello, accederán a una zona más céntrica de la ciudad, junto al paseo de La Alameda, y ocuparán el gol sur del estadio.
Además de en autobuses y vehículos particulares, está prevista la llegada de entre veinticinco y treinta aviones procedentes de Bilbao a lo largo del mismo día del encuentro, mientras que desde Barcelona los seguidores llegarán en autobuses, en coches y en dos trenes, pero no por vía aérea.
Se espera, según la previsión policial, que los aficionados del Barcelona salgan en dirección a Valencia a partir del mediodía o primera hora de la tarde del miércoles y su punto de concentración estará en el mismo acceso norte a la ciudad, muy cerca de Mestalla, por lo que ocuparán el gol norte del campo valenciano.
El dispositivo que dirige la Policía coordina el trabajo de la Policía Local, Bomberos, Cruz Roja, Protección Civil y seguridad privada del campo de Mestalla.
Se trata de un partido de alto riesgo, como cualquier final, para el que cada club participante ha dispuesto de 18.740 localidades.
La Policía recomienda no viajar a Valencia sin entrada, ya que las taquillas van a estar cerradas y se va a desarrollar un plan especial para evitar la reventa, de la misma manera que se trabajará en la prevención de hurtos tanto a los seguidores que vengan a ver al final como en sus vehículos.
Las puertas del estadio estarán abiertas dos horas antes del inicio del partido y la Policía recomienda a los aficionados que lleguen a Mestalla con la mayor antelación posible, puesto que los controles en los accesos serán minuciosos y no está previsto que se aceleren por la cercanía de la hora de inicio del partido.
