El embajador de Estados Unidos en España, Alan Solomont, ha considerado hoy difícil que el presidente estadounidense, Barack Obama, venga a España antes del final de este año debido a su "apretada" agenda interna.
Solomont, en un desayuno informativo organizado por Europa Press, ha dicho desconocer la agenda de Obama para los próximos meses y si estaría en sus planes visitar España, después de que decidiera cancelar su asistencia a la cumbre UE-EEUU, que el Gobierno había programado en mayo en el marco de la presidencia de turno, para ocuparse de la política interna. "No puedo predecir o aventurar cuándo (Obama) va a visitar España", ha respondido Solomont a la pregunta de si este viaje podría ser en el último trimestre del año, antes o después de su participación en la cumbre de la OTAN que se celebrará en Lisboa a mediados de noviembre.
Según el embajador, el presidente de EEUU "tiene una agenda muy apretada para lo que queda de año", centrada en las elecciones legislativas de su país a principios también del mes de noviembre.
Ha reconocido que el gran reto de Obama era sacar adelante la reforma sanitaria y hacer frente a la crisis económica interna, aunque ha apuntado otros objetivos a los que tiene que hacer frente en los próximos meses, a otros proyectos en sectores como el financiero o el del medioambiente. "Lo más probable es que se centre en todo eso", ha resumido Solomont, quien, no obstante, ha confiado en "ver pronto" a Obama en Europa.
El presidente de EEUU estará mañana precisamente en Praga para firmar con el presidente ruso, Dmitri Medvédev, el nuevo tratado de reducción de armas nucleares.
El embajador ha insistido en que el motivo por el que Obama suspendió su presencia en la cumbre UE-EEUU fue la "agenda doméstica" y que Europa, adonde viajó seis veces en su primer año de mandato, es "el socio más importante" con el que cuenta "en el mundo".
Solomont, quien se incorporó a su cargo el pasado 9 de enero en sustitución de Eduardo Aguirre, ha destacado también la relevancia que su país da a la relación con España, al que ha definido como "uno de sus principales aliados".
Además de en asuntos como Oriente Próximo o Irán, ha valorado la cooperación bilateral en la lucha contra el terrorismo internacional y la aportación de España en Afganistán, después del envío de otros 500 soldados.
Solomont ha agradecido igualmente la ayuda prestada para el cierre de la cárcel de Guantánamo y la disposición a acoger a cinco presos, de los que el primero, de origen palestino, llegó a España el pasado 24 de febrero.
A su juicio, "es responsabilidad de todos los países" colaborar en la clausura del penal en el que Estados Unidos recluyó a sospechosos de vínculos con Al Qaeda y los talibanes desde finales de 2001, tras los atentados del 11 de septiembre en Nueva York.
Preguntado por si se va a pedir al Gobierno español que acoja a más de cinco prisioneros, ha respondido que EEUU "va a continuar pidiendo a la comunidad internacional" que siga prestando ayuda para poner fin a la cárcel, después de que Obama no pudiera cumplir su promesa de hacerlo al término de su primer año en la Casa Blanca.
Solomont, empresario dedicado al sector sanitario que ha sido uno de los principales recaudadores del Partido Demócrata en los últimos años, ha confiado en que las relaciones con España vayan a más, después de reconocer que hubo algunos "altibajos", en alusión a las diferencias que había entre el anterior presidente de EEUU, George Bush, y el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero.
No ha concretado cómo Estados Unidos puede mejorar su ayuda en la lucha contra ETA, aunque ha querido felicitar al Gobierno y a Francia por los éxitos policiales logrados en los últimos meses.
Ha expresado su satisfacción personal por el tiempo que lleva en España y por la hospitalidad con que se le ha acogido en los lugares que ha visitado. Ha confesado su afición por el fútbol, en especial, por el Real Madrid y el Barcelona, y ha dicho que, dentro de dos semanas en Sevilla, irá por primera vez a los toros.
