Con motivo de la Semana de la Arquitectura organizada por el Colegio de Arquitectos de Sevilla y la Fundación Fidas, su decano, Ángel Díaz del Río, repasa el estado de la profesión, a su juicio, atacada por muchos frentes y con una carga de trabajo aún más baja que en 2010.
-Una de las novedades de este año es el proyecto TV Arquitectura de dos jóvenes colegiados. ¿Cuál es su objetivo?
-La idea es proyectar la ciudad y su arquitectura por la red, así como que sea una ventana de la mejor arquitectura mundial. No sólo se centra en la ciudad. Dentro de la filosofía actual de que la televisión actual está estancada -ellos defienden que está muerta- y dado que el mercado de las revistas está saturado, han desarrollado una revista televisiva on line. Tiene foros de actualidad, entrevistas con los arquitectos sevillanos más relevantes... Es un proyecto muy completo que no hemos encontrado en ninguna parte del mundo. Serán la voz de los arquitectos en cuanto a temas de interés.
-Dentro del programa de visitas guiadas, por primera vez se incluyen este año las setas y el Antiquarium.
-Sí, pero yo estoy francamente satisfecho con haber podido recuperar la visita a las cubiertas de la Catedral. Es la visita estrella porque son muy inaccesibles y se ve otra Sevilla. La Sevilla más gótica.
-Usted criticó el proyecto de la Encarnación, su coste, su tramitación, su impacto...
-Lo cortés no quita lo valiente. Me parece positivo que por fin se haya resuelto el problema de la Encarnación y también dije que el proyecto era ilusionante e interesante. Rodó por medio mundo antes de construirse, pero su ejecución no dio los resultados esperados.
-¿Qué es lo que menos le gusta de Metropol Parasol?
-Conceptualmente, el error más importante que tiene es la plaza elevada. Sevilla es plana y el espacio público tiene que estar en esa cota.
-¿Cambió en algo su opinión tras ver el resultado final?
-Las expectativas visuales y paisajísticas que nos presentaron se perdieron en la ejecución. Y en arquitectura, el arquitecto debe mejorar en la ejecución su proyecto. El resultado ha sido fallido y creo que espacios públicos como ese deben ser gestionados íntegramente por el Ayuntamiento.
-La Gerencia de Urbanismo no encontró irregularidades en la licencia de la torre Pelli de Cajasol, ¿cree que el Ayuntamiento tiene posibilidad aún de parar el proyecto que usted también cuestionó?
-Como administración competente, tiene la capacidad de pedir las reformas o cambios que vea oportunas y de hecho estamos ante un Ayuntamiento acostumbrado a estas prácticas. La Gerencia de Urbanismo de Sevilla ocupa el primer puesto en las gerencias más complejas para obtener una licencia, lo que no es bueno ni para los profesionales ni para la inversión ni para la regeneración de la ciudad. ¿Que si tiene posibilidades? Pues sí, pero hay que tener voluntad política. La gran pregunta, la que se hace la Unesco, es qué aporta el proyecto, la torre Pelli, a la ciudad.
-¿Cree que la Unesco quitará el sello de Patrimonio Mundial a Sevilla por la torre Pelli?
-La Unesco es un sistema muy complejo y funciona por presiones políticas. Son organizaciones complejas, no sé qué puede hacer. Lo cierto es que se construye la torre y no las infraestructuras necesarias. Antes de inaugurarse debería haber una boca importante de Metro, por ejemplo.
-¿Notó cambios en el funcionamiento de la Gerencia con el nuevo gobierno municipal?
-No he percibido ni conozco ningún cambio, pero me consta que hay voluntad de hacerlo en el tema de licencias e ITE. En Sevilla es muy difícil lograr una licencia en menos de ocho meses.
-¿Cómo está la carga de trabajo de los arquitectos?
-Este año es peor que 2010, cuando hubo un pequeño repunte del 8% en la provincia de Sevilla. La bajada de ingresos de visados es del 26% respecto al 2010. Y además, en Madrid, Barcelona o Navarra los arquitectos hacen cosas que les encargan los clientes que aquí son impensables. Por ejemplo, un anteproyecto de una posible incorporación de un salón y una cocina. Aquí no hay cultura para eso.
-Jordi Ludevid, presidente del Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de España, asegura que se está atacando a los arquitectos porque les usurpan sus competencias, ¿piensa igual?
-Sí, por varios motivos, y Bolonia se ha traducido en un simple ajuste presupuestario.
