La crisis económica ha recortado los ingresos de todas las administraciones y, por tanto, sus presupuestos. Ante esta situación, todos los departamentos de Cultura -Consistorio, Junta y Gobierno- verán el próximo año mermadas sus cuestas. En Sevilla, no sólo la Orquesta Sinfónica o el Maestranza van a padecer la coyuntura actual, como avanzó la portavoz municipal, Maribel Montaño. El Ayuntamiento se verá obligado a reducir en 2010 el presupuesto de todos los festivales entre un 20 y un 40 por ciento. Desde la Bienal al Festival de Cine, pasando por los certámenes de iniciativa privada, el Ejecutivo local no tendrá más remedio que recortar.
Desde el Instituto de la Cultura y las Artes (ICAS) indicaron a El Correo que aún no se han concretado las reducciones, ya que aún no se han cerrado los presupuestos municipales. Pese a todo, reafirman su compromiso de mantener todos los certámenes, a pesar de la difícil situación económica que atraviesa el Ayuntamiento.
De hecho, hace aproximadamente un mes, la directora del ICAS, Paz Sánchez, reunió a todos los directores de festivales para comunicarles la situación -que, por otra parte, es pública y notoria- y pedirles un esfuerzo y que se aprieten el cinturón el próximo año.
Por el momento, una de las citas culturales de la ciudad que ya sabe que sufrirá un buen recorte será el Festival Internacional de Teatro y Artes Escénicas de Sevilla (feSt).
El certamen que cada primavera se celebra en Sevilla se verá obligado a reducir su oferta y su duración a la mitad, es decir, una semana, en lugar de las dos habituales. "Vamos a hacer un feSt de crisis, pero con la esperanza y la promesa por parte de las administraciones de que se trata de una situación transitoria que volverá a la normalidad cuando pase este bache", según explicó a este periódico el director de esta iniciativa, Pedro Álvarez-Ossorio.
El Ayuntamiento es la institución que más aporta y, también, la que más baja su inversión, en un 40 por ciento. Así, el próximo año destinará a este proyecto 120.000 euros, en lugar de los 200.000 de la edición anterior -que financiaba a través del ICAS y de la sociedad pública De Sevilla-. Pero la crisis no sólo afecta al Consistorio.
El Ministerio de Cultura recortará también su colaboración un 10 por ciento, pasando de los 75.000 euros de este año a 67.500 euros en 2010. La Junta de Andalucía, que hasta ahora ha sido la administración que menos ha puesto en el feSt, es la que aún no ha confirmado si mantendrá sus 30.000 euros. "Nosotros esperamos que, como su aportación no es muy amplia, la aumente y supla así las otras pérdidas", comenta Álvarez-Ossorio, quien asegura que entiende que la crisis obligue a este tipo de medidas: "Lo veo normal, si es proporcional a todos los sectores, pero esperamos que sólo sea algo transitorio. Mientras, trataremos de implicar a nuevas instituciones para paliar este déficit". La idea de la organización es reducir la programación, pero ampliar el número de sedes. Se sumarían así las últimas incorporaciones al mapa cultural de la ciudad, como la Sala Fli.
"El hilo conductor del feSt 2010 será la crisis, pero no como un elemento negativo. No me gustan los llantos. Vamos a buscar el lado positivo y potenciaremos un festival mucho más participativo", concluyó su director.
