El Festival Flamenco de Juan Talega, de Dos Hermanas, celebró el viernes en el Auditorio los del Río su trigésima edición con una noche de buen flamenco a cargo de modestos artistas que, sin embargo, dieron la talla. Desde el aficionado, de sólo 24 años, Eduardo Hidalgo, de Valdivia (Badajoz), que actuó como ganador del concurso, hasta El Polaco, que cerró con una actuación pletórica.
Todos fueron merecedores de ser destacados en esta crónica, pero hay que resaltar las actuaciones de la cantaora roteña Manuela Cordero, del joven cantaor chiclanero Antonio Reyes y del ya maestro granadino Luis el Polaco. La de Rota se hizo acompañar por un gran guitarrista, Manuel Herrera, para dejarnos unas estupendas alegrías y unas profundas seguiriyas, además de una rotunda versión por bulerías de En la encrucijada, de Marifé de Triana.
Antonio Reyes bordó las seguiriyas y las bulerías conducido por el guitarrista Antonio Higuero, y hasta improvisó una zambra caracolera en compañía de su mujer. El hermoso metal gitano de este cantaor maravilló a todos. Pero la actuación más meritoria fue la de El Polaco, por cerrar cuando apenas había público y entregarse de una manera admirable cantando zambras, una genial tanda de tangos y una estupenda versión de la Estrella, de Morente. También fue muy aplaudida la actuación de Pepe Galán, que sigue conservando una magnífica voz.
