Filipescu, Caminero y Karhan, en el Betis-Valladolid de la 99-00.
La lista liguera de Pepe Mel para el Betis-Celta fue noticia por la ausencia total de canteranos. Hacía 37 años que no ocurría un hecho así en el equipo verdiblanco. Semejante vacío tiene tan pocos precedentes que, aun habiendo jugadores de la casa en las convocatorias, tampoco son muchos los ejemplos de partidos en los que la cantera no jugase ni un minuto en un encuentro de Liga, como también sucedió el domingo, obviamente. Hay que retroceder casi catorce años para encontrar la prueba, lo que equivale a una barbaridad de partidos. En total han sido, atención, 402 jornadas consecutivas con algún canterano en el terreno de juego, aunque fuese sólo diez segundos.
La última vez que no ocurrió así fue en el Betis-Valladolid de la 17ª jornada de la campaña 99-00 (22 de diciembre de 1999). Era la despedida del estadio Benito Villamarín. Con el cambio de año se inauguraron Fondo y Gol Norte y el coliseo pasó a llamarse Manuel Ruiz de Lopera. Aquel miércoles, el conjunto de Carlos Griguol cayó 0-1 y sólo Juan Merino estaba en la lista, pero no jugó. La alineación y los cambios fueron como sigue: Prats; Otero, Crosa, Bornes, Filipescu; Benjamín (Chirola, m. 62), Alexis (Gálvez, m. 77), Karhan, Denilson; Finidi y Alfonso (Oli, m. 19).
No fue la primera vez que Griguol prescindió de cualquier rastro de la cantera en la Liga. En otro choque igualmente significativo, el derbi de la primera vuelta, disputado el festivo 12 de octubre, citó a Merino, Cañas y Rivas, pero ninguno participó de la derrota por 3-0. El central, de hecho, fue el descarte de última hora, ya que había 19 hombres en la lista.
Ese tránsito entre el Betis subcampeón de Copa del 97 y el Betis del descenso fue complicado para los futbolistas de la casa. Merino, Cañas y Ureña ya tenían una edad, Cuéllar apuraba su ocaso verdiblanco y jóvenes como Capi, Varela o Juanito no hallaban un técnico que les diese una ocasión.
En la campaña 98-99 también hubo un par de partidos sin participación alguna de canteranos. En la 3ª jornada sólo Ureña fue citado pero no jugó en un 1-0 ante el Salamanca en Heliópolis. En la 8ª jornada fueron citados Robles, Cuéllar y Merino (este último, descartado allí) en un 1-0 en Santander. Y en la 97-98, en la 3ª jornada, sólo Merino fue llamado para un Celta-Betis (2-0).
SIN CANTERANOS EN EL ONCE TITULAR
Los precedentes de un Betis sin un canterano en el once titular son más cercanos. El último, antes del domingo pasado, aparece con Pepe Mel en la jornada 35ª de la temporada 2011-12 (2-2 contra el Atlético). A lo largo del partido entraron Beñat y Pozuelo. El trianero, de hecho, logró el 1-1 provisional. También fueron citados Casto, Isidoro y Cañas. En la jornada 5ª de ese mismo curso, en Getafe, tampoco hubo canteranos en la alineación pero al final tuvieron minutos Beñat y Vadillo. En el banquillo, Adrián y Cañas.
En el año del ascenso (2010-11) también ocurrió una vez, en la jornada 6ª, en un 3-0 contra la Ponferradina en el Villamarín. No hubo ningún jugador de la casa en el once pero luego fueron entrando Ezequiel, Juande e Isidoro.
Antes de eso hay que remontarse de nuevo al descenso de la 99-00. En medio, una década de presencia continua de la cantera en las alineaciones y las convocatorias y un gran éxito, el título de Copa de 2005, con amplia presencia de la casa: Doblas, Juanito, Rivas, Varela, Arzu, Melli, Dani... En esa época hubo partidos con hasta ocho o nueve canteranos en el campo. Eran otros tiempos.
