La Fiscalía de Málaga ha solicitado dos años de prisión, siete de inhabilitación y una multa de 3 millones de euros para el que fuera alcalde de Manilva, Pedro Tirado, ex miembro del Grupo Independiente Liberal (GIL).
El Ministerio Público le acusa de un delito de cohecho por favorecer a cambio de dinero una operación urbanística que generó 92 millones de euros en plusvalías en menos de dos años. Este caso de corrupción fue destapado en 2005 a raíz de una de las grandes operaciones policiales contra el blanqueo de capitales, el caso Ballena Blanca.
Según el escrito de acusación, al que ha tenido acceso este periódico, Tirado, que pertenecía al Partido Democrático de Manilva cuando dejó el GIL, posibilitó presuntamente mediante un convenio urbanístico que la finca La Parrada de Manilva, que se adquirió por 9,7 millones de euros, fuera vendida posteriormente por 117 millones de euros. Esto supuso un "espectacular incremento" de su valor, que se multiplicó por diez en menos de dos años.
Gracias a este acuerdo "se consigue aumentar la edificabilidad de los terrenos" en un 80% ya que en el suelo de la finca se pasó de poder construir 1.300 viviendas a 2.340. Tirado permaneció en prisión preventiva durante un mes y medio tras ser intervenidos en su casa la cantidad de 762.000 euros en bolsas de plástico en los registros efectuados por los agentes de la policía.
