José Luis Martí se incorporará a las filas del RCD Mallorca de manera oficial tras la reunión que han concertado para mañana su agente, Miguel Ángel Cermeño, y el director deportivo de la entidad balear, Fernando Pons, en las dependencias del Ono Estadi. El centrocampista, que volará hoy hacia el aeropuerto de Palma, estampará su firma después de superar el rutinario reconocimiento médico. El nuevo discípulo del jiennense Gregorio Manzano se incorporará al stage del cuadro rojillo en Kössen (Austria) en la sesión matinal del próximo martes.
Pese a que aún no es oficial, Sevilla y Mallorca han alcanzado un acuerdo total en la duración del contrato, de dos años de vigencia, y en las cantidades pactadas, apenas 500.000 euros en concepto de objetivos debido a la grave crisis económica en la que se ha sumido la entidad que preside el empresario Vicenç Grande. El primer rector bermellón delegó en el secretario técnico de la entidad, Nando Pons, la máxima responsabilidad en la gestión, que se ha detallado en un plazo de 48 horas.
El agente del jugador, Miguel Ángel Cermeño, declaró a El Correo que el acuerdo es total entre ambos equipos. "El Sevilla ha permitido que el jugador se marche de la concentración porque acepta todas las condiciones del contrato", precisó. Con todo, las únicas diferencias entre el balear y su club de destino, el RCD Mallorca, son de carácter económico.
Pons ha ofrecido al ex sevillista una cantidad fija a percibir de forma anual, mientras que el mediocentro exige unas variables en concepto de objetivos. La liquidez de las arcas del staff directivo balear apenas aporta garantías a la negociación, que podría perfilarse por la petición expresa del propio José Luis Martí. "No pedimos nada fuera de lo común, aunque estamos dispuestos a ceder un poco para que todos salgamos beneficiados", aseguró Cermeño. En la ronda de contactos, el Mallorca solicitó su fichaje de forma gratuita, una petición que el Sevilla rechazó taxativamente.
según objetivos. Sin embargo, Nando Pons, ante el panorama de la negociación, decidió lanzar una contraoferta que la entidad de Nervión finalmente aceptó. El jugador se enrolará en la disciplina del cuadro que dirige Gregorio Manzano sin necesidad de que su nuevo club abone una cantidad fija. El Mallorca deberá pagar 500.000 euros si su primer equipo logra regresar a Europa cuando la campaña regular expire.
