El Gobierno aprobó ayer el Real Decreto Ley de Racionalización del Gasto Farmacéutico por el que se reducirá en 1.500 millones de euros el gasto sanitario, aunque las farmacias se verán beneficiadas por un aumento en el volumen de facturación a partir del cual abonarán un porcentaje de sus ventas.
El documento, que fue consensuado con los partidos políticos y acordado por unanimidad en el último Consejo Interterritorial de Salud, se enriqueció con algunas medidas después de las críticas vertidas por Farmaindustria y las oficinas de farmacia al recaer sobre ellas la contención del gasto sanitario.
A través de esta medida, se modificará el cálculo de los precios de referencia de los medicamentos, se rebajará un 25% el de los genéricos y se fijará un precio máximo de financiación para algunos fármacos dirigidos a síntomas más leves.
Pese a este esfuerzo, las farmacias se verán favorecidas al tener que pagar al Sistema un 7,8% de sus ingresos, en lugar del 8% que aportaban hasta ahora, y hacerlo sólo a partir de una facturación de 37.500 euros al mes superior a los 32.336 actuales.
La modificación de la escala de aportaciones por volumen de ventas será "más equitativa" según se declaró en las negociaciones, al permitir que paguen menos las farmacias que menos facturen e incluso que un gran número de boticas dejen de pagar, y solamente las que más ganan aumenten su aportación al sistema, según el departamento que dirige Trinidad Jiménez.
