Las campanas doblaron ayer en Conil en señal de duelo por las dos últimas muertes que se han producido por la inmigración ilegal. Cuando aún no ha finalizado el primer mes del año, más de un centenar de inmigrantes ha llegado a las costas andaluzas. Un fenómeno que el Gobierno intentará frenar con 200 millones más en el presupuesto de 2008.
Varios colectivos sociales como la asociación Cardijn o Pro Derechos Humanos exigieron ayer en una concentración en Conil (Cádiz) que estas tragedias no se conviertan en una rutina. Con este fin, el próximo martes los 40 diputados de la Diputación Permanente del Congreso están convocados a una sesión extraordinaria en la que se convalidará un Real Decreto que incluye una partida de 200 millones con la que se pretende reforzar el dispositivo para atender la inmigración ilegal. Una parte de esta inversión se destinará a las comunidades que se encargarán de distribuir los recursos entre los municipios con actividades destinadas a la integración de los inmigrantes.
El refuerzo de los medios humanos y materiales para hacer frente a la llegada de pateras será otra de las medidas económicas. Se extenderá el Sistema Integral de Vigilancia Exterior a otras zonas del país. Este servicio, que capta las pateras a través de cámaras y que coordina el dispositivo de rescate, opera en todo el litoral gaditano.
Sin embargo, la muerte el pasado martes de dos personas tras volcar su embarcación en aguas de la playa de Sancti Petri, en Chiclana, ha generado las críticas de la Asociación Unificada de Guardias Civiles de Cádiz, que ha denunciado la falta de medios humanos. El secretario de Comunicación, Juan Antonio Delgado, aseguró que hay más cámaras que agentes y que en ocasiones las jornadas son demasiado largas para evitar posibles despistes. "El SIVE salva vidas y es eficaz pero cuando está en pleno rendimiento", señaló.
La Subdelegación del Gobierno explicó que este servicio cuenta con los efectivos necesarios y señaló que esta patera no fue avistada debido al abundante oleaje y a la sobrecarga de la embarcación, que al hundir buena parte de su estructura la hace invisible ante los radares. Sobre esta patera, la Guardia Civil localizó ayer a otros tres magrebíes que viajaban a bordo de la embarcación, con lo que la cifra de interceptados asciende a 20, además de los dos que murieron.
El diputado socialista Salvador de la Encina admitió que el SIVE no es infalible aunque recordó que el pasado año posibilitó el descenso del número de inmigrantes que intentaron llegar a las costas gaditanas en un 80% en comparación con 2006. "Eso se ha conseguido gracias al incremento de efectivos, de patrulleras, de la eficacia del SIVE, pero a veces no se pueden evitar al 100% estas tragedias", indicó.E