El Gobierno ha excluido de la composición del consejo de administración de RTVE a los dos miembros elegidos por los sindicatos CCOO y UGT, tal y como recoge el Real Decreto sobre la modificación del sistema de renovación de la corporación publicado hoy en el BOE. El Ejecutivo asegura que la representación de los trabajadores está “completamente garantizada” a través de su presencia en los comités de empresas de las sociedades que forman RTVE.
El actual consejo de administración de la corporación fue nombrado en enero de 2007. La composición de este órgano estaba formada por cuatro miembros a elección del PP, dos por parte del PSOE y uno de CiU, otro de IU, otro de ERC, los dos representantes de UGT y CCOO y el presidente. En la actualidad el consejo cuenta con tres vacantes, una de ellas el puesto de presidente y, además, ha expirado el mandato de cinco de los consejeros desde 2010. El Consejo de Informativos de TVE se mostró ayer “preocupado” ante la reforma del sistema para elegir al presidente de la Corporación, y teme que se ponga en riesgo la independencia actual.
El consejero de UGT, Santos Miguel Ruesga, criticó al Gobierno por querer convertir a TVE en “un instrumento de ideologización”, mientras que CCOO acusó al Ejecutivo de acabar con el “espíritu de una TVE sin gubernamentalizar”.El secretario de Organización del PSOE, Oscar López, aseguró que el PP “no soporta el pluralismo” y que “quiere volver a la televisión del siglo anterior”.
El coordinador federal de IU, Cayo Lara, dijo que esta decisión supone un “ataque” al ente público por “la falta de voluntad” política de buscar consenso. La portavoz de UPyD, Rosa Díez, consideró “un retroceso” la decisión del Gobierno. “Los profesionales no necesitan censores”, sostiene. El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, también lo rechazó y advirtió de que desaparecerá la pluralidad del consejo.
El portavoz del PP en la Comisión de Control de RTVE, Ramón Moreno, contestó acusando al PSOE de moverse sólo por “intereses partidistas” en cuanto a la renovación de cargos y de no querer solucionar un “problema”.
