El Gobierno destina más de 600 millones de euros anules a iniciativas de accesibilidad para discapacitados, centradas en fomentar el acceso al empleo y a las nuevas tecnologías de estas personas y a la eliminación de barreras arquitectónicas en las zonas urbanas.
Se trata de "los euros de la solidaridad y de la igualdad de oportunidades", según ha señalado hoy en Málaga la secretaria de Estado de Política Social, Familias y Atención a la Dependencia y la Discapacidad, Amparo Valcarce, en la inauguración del III Congreso Nacional de Accesibilidad Universal.
Valcarce ha explicado que no solo se trata de eliminar barreras arquitectónicas, sino de "diseñar los productos, servicios y entornos para que sean accesibles" para todas las personas sin necesidad de corregirlos.
Ha manifestado que en el congreso, en el que se dan cita expertos de toda España, "se van a ver retos muy importantes, como hacer accesible el patrimonio histórico y las nuevas tecnologías", ya que, si todas las personas no acceden en igualdad se estarán creando "barreras que en el siglo XXI significan exclusión".
En su discurso, Valcarce ha asegurado que todavía "son muchos los municipios cuyos edificios, parques o instalaciones no son accesibles", para lo que ha pedido un "esfuerzo común" porque esto se puede solucionar con sólo pensar en los discapacitados en el momento de diseñar el proyecto.
"No sólo consiste en adaptar entornos físicos, sino también en la mentalidad", ha dicho la secretaria de Estado de Política Social, quien ha afirmado que el grado de sensibilización de los responsables municipales "permite albergar esperanzas".
Valcarce considera que los municipios juegan "un papel esencial" en este sentido, ya que "el diseño para todos debe ser la norma y no la excepción".
Durante la inauguración, se ha hecho entrega de las cuatro primeras banderas de accesibilidad en España a las playas valencianas de El Cabanyal, Malvarrosa y Sagunto, y a la asturiana de Santa Marina, en Ribadesella, que otorga la Asociación Española de Normalización y Certificación (Aenor).
Esta certificación contempla no solo las pasarelas y los equipos que facilitan el baño a discapacitados, sino también el personal capacitado para asistirles, los aseos, duchas y vestuarios, así como los primeros auxilios y salvamento.
Por su parte, la consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, ha informado de que el 78,3 por ciento de los ayuntamientos andaluces y el 87 por ciento de los malagueños cuentan con planes de accesibilidad subvencionados por la Junta.
Navarro ha manifestado que "eliminar barreras físicas siempre es más fácil que eliminar barreras mentales", por lo que ha abogado por la educación como "primer factor de igualdad" y por "acompasar un poquito el ritmo para que todos vayamos a la misma velocidad".
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha recordado que la ciudad también cuenta con siete playas con otro certificado de accesibilidad y ha hecho hincapié en la fuerza del movimiento asociativo como factor para el desarrollo de medidas de accesibilidad universal.
