El sueco Martin Erlandsson, con 65 golpes (siete bajo par, nuevo récord del campo), se ha colocado líder en la primera jornada del Abierto de España 2008, que se disputa en el Real Club de Golf de Sevilla, donde los mejores españoles han sido Ignacio Garrido y Jordi García, ambos con 66 (-6).
Erlandsson, que también tiene el récord del campo de Barbazon en The Belfry, en el Máster británico, con nueve bajo par (63 golpes), se hizo con el liderato merced a siete birdies en los hoyos 1, 4, 7, 8, 9, 14 y 16. Jordi García, que en algunos momentos se emparejó con Erlandsson, presentó una tarjeta con seis birdies (hoyos 1, 2, 3, 9, 14 y 16) y un eagle (hoyo 13); y aspira a su segundo sueño, "desde pequeño, el de jugar la Copa Ryder", ya que el primero lo cumplió al ganar un torneo de Peugeot y "tener el coche que deseaba entonces".
Por su parte, Garrido, ganador del Campeonato de España de 1997 en este campo, logró siete birdies (hoyos 1, 2, 3, 9, 14, 16 y 18), por delante del inglés Gary Clark (-5), con ocho birdies, y afirmó que hizo un "juego perfecto" y que hoy tratará "de repetir" en un campo de altura "para un Abierto de España".
Carlos Rodiles, con 68 (-4), fue otro de los españoles destacados en esta jornada inaugural en el Real Club de Golf de Sevilla. Entre los españoles también mención para Francis Varela quien, con un total de 71 golpes (-1), consiguió dos eagles (dos golpes menos), en los hoyos 13 y 16, labor que empañó con dos bogeys (hoyos 6 y 14) y dos dobles bogeys (hoyos 2 y 15). Miguel Ángel Jiménez, uno de los principales favoritos al triunfo, concluyó con una tarjeta de 70 goles (-2), después de siete birdies (hoyos 2, 3, 5, 8, 9, 15 y 16), y cinco bogeys (hoyos 1, 7, 10, 14 y 17).
El danés Soren Hansen, ganador de, entre otros, el Abierto de Irlanda del 2002, se mantuvo a la estela de Erlandsson, Jordi García, Garrido y Clark, y concluyó con 68 golpes (-4), los mismos que el sueco Henrik Nystrom.
Entre los jugadores de los que más se esperaba en los albores de esta competición están el norteamericano John Daly, con un Abierto británico (1995), un campeonato PGA (1991) y tres triunfos en el circuito norteamericano, y uno de los favoritos al triunfo, que quedó sin embargo relegado a un segundo plano con un total de 75 golpes (+3).
Más de centenar y medio de jugadores participan en este torneo, seguido por numeroso público en jornada casi veraniega y que tiene un montante de dos millones de euros en premios.