Abrir la brecha de ocho puntos que el Barcelona tiene de ventaja o minimizar la sangría por parte del Real Madrid son los parámetros del gran encuentro de hoy en el Camp Nou, un partido presidido por el gran momento de los dos equipos y las reivindicaciones independentistas de los catalanes.
El Barça, que ha sumado los dieciocho puntos en juego disputados, tiene la posibilidad de firmar su mejor arranque de la historia. El triunfo en Sevilla permitió a Tito Vilanova igualar los números de Pep Guardiola, Johan Cruyff y Louis Van Gaal, así que ahora tiene la posibilidad de hacer historia.
En lo deportivo, Vilanova tiene bastantes dudas. La principal es en la defensa. Lesionado Puyol, que estará de baja un par de meses por una luxación en el codo, tampoco está al cien por cien Piqué. El central se lesionó un tobillo el 19 de septiembre y desde entonces no ha jugado. De hecho ni siquiera se ha entrenado con el equipo y se sometió ayer a una última prueba para determinar si puede estar disponible. Piqué estaría dispuesto a jugar infiltrado, pero hay que evaluar los riesgos. En el caso de que no esté disponible, el panorama defensivo no admite dudas en el eje: Song y Mascherano.
La otra duda principal está en el centro del campo. Vilanova ha recuperado al brillante Iniesta, pero tiene que decidir si le da entrada en el equipo o si sigue confiando en Cesc. El jugador de Arenys, después de un largo periodo sin marcar, ha conseguido tres goles en los dos últimos partidos. Su especial conexión con Messi le otorga opciones de jugar como titular e incluso la posibilidad de dejar en el banquillo a Alexis o a Pedro.
En el Real Madrid, el portugués José Mourinho ha restado importancia al resultado del clásico, pero los jugadores saben que una desventaja de once puntos nunca ha sido remontada en un pulso por el título de Liga. Se agarra el madridismo al crecimiento de su equipo con Mourinho para cambiar la dinámica en los duelos con el Barcelona. Ha pasado de encajar goleadas y perder títulos a dar un golpe de autoridad en la última visita liguera al Camp Nou para sentenciar la Liga o vencer en la Supercopa.
Juega al despiste el técnico portugués con su equipo titular. Sin querer desvelar nada pero admitiendo que seguirá un patrón respecto a los últimos clásicos. En ellos nunca apostó por el trivote y aunque planea la idea de juntar a Khedira, Essien y Xabi Alonso para aumentar el músculo en la zona de creación del fútbol azulgrana, quien tiene más opciones de jugar es Modric. Es la duda por despejar. La presencia de Modric, Kaká u Özil para enganchar con la velocidad de Cristiano Ronaldo y Di María.
El Real Madrid marcó en sus cinco últimas visitas al Camp Nou. Cristiano lo hizo en las cuatro últimas. El portugués llega en plena racha goleadora tras mejorar su físico. Dos hat-tricks seguidos y en el fondo la lucha con Messi por un nuevo Balón de Oro. El argentino lleva tres partidos sin marcar, pero a la hora de la verdad nunca falla. Un nuevo capítulo del duelo más universal.
