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El gran logro de Chaparro y las dos caras del Betis

El Betis vive quizás las mejores horas de la temporada, un buen momento para recordar que Paco Chaparro, después de quince partidos y medio, tiene a su equipo en números europeos, pero también para avisar de cómo baja el rendimiento cuando su rival es de la zona baja. Foto: EFE.

el 15 sep 2009 / 02:32 h.

El Betis vive quizás las mejores horas de la temporada, un buen momento para recordar que Paco Chaparro, después de quince partidos y medio, tiene a su equipo en números europeos, pero también para avisar de cómo baja el rendimiento cuando su rival es de la zona baja. Un Betis de dos caras, como el sábado.

En la temporada del último descenso, el Betis de Guus Hiddink venció al Barcelona por 2-1 y algunos osados se atrevieron a pensar en alcanzar los puestos de UEFA, pero el equipo ya no volvió a ganar ni un solo partido con el técnico holandés y se fue de cabeza a Segunda División. Las circunstancias no son iguales, ni siquiera parecidas, aunque tampoco es mentira que los béticos respiran más y mejor después de la gran remontada de los suyos frente al gigante azulgrana el pasado sábado. La alegría, desde luego, no da para hablar de competiciones europeas, pero los números del conjunto verdiblanco con Paco Chaparro al frente, curiosamente, sí son dignos de UEFA, incluso de Liga de Campeones si el partido ante el Athletic se acaba reanudando y los heliopolitanos consiguen la victoria. Ahora bien, como este santo club siempre tiene dos caras (sólo hay que ver lo que ocurrió el sábado), le toca visitar al Zaragoza, cuarto por la cola, y la vida es otra para el Betis en este tipo de enfrentamientos.

Un Betis de UEFA... incluyendo la derrota con el Athletic. El balance del Betis desde que Chaparro relevó a Héctor Cúper se traduce en ocho triunfos, tres empates y cinco derrotas, incluida la del Athletic porque así consta en la Liga de Fútbol Profesional. En total, 27 puntos de 48 posibles (16 de 24 en casa y 11 de 24 fuera). En la clasificación parcial entre las jornadas 15ª y 30ª, la escuadra del trianero sería sexta, con los mismos puntos que el Racing, quinto, y a sólo dos del Sevilla, cuarto. Hablando en hipótesis, la zona de privilegio estaría al alcance de los verdiblancos si el partido ante el Athletic se reanudase y ellos consiguiesen remontar el 1-2 en vigor.

Otro vistazo a esa tabla virtual determina igualmente que el Betis de Chaparro iría sobrado en la lucha por la permanencia, ya que aventajaría en doce puntos al tercero por la cola, que casualmente es el Zaragoza (15 puntos). En todo caso, el trianero presenta un superávit de +9 puntos en tan desagradable tarea: cuando llegó al banquillo, el Betis estaba a cuatro puntos de la salvación; ahora lleva cinco de ventaja sobre el antepenúltimo.

Bien contra los de arriba. Con Chaparro en el mando técnico, el Betis ha sido capaz de vencer a los tres equipos que pelean por la Liga. En su reeestreno en el banquillo, en El Madrigal, batió al Villarreal (0-1), a mediados de febrero remontó ante el Real Madrid en casa (2-1) y hace tres días repitió la gesta frente al Barcelona (3-2). Y no es casualidad. La gran paradoja de este Betis que pelea por evitar el descenso es que al mismo tiempo se ha convertido en un incordio para los equipos mejor clasificados del campeonato, es decir, los de la mitad noble. Ya ha disputado dieciséis encuentros frente a ellos y su marca es de 22 puntos, la quinta mejor de toda la Liga. Su promedio es de 1,37 puntos por cada partido jugado contra un enemigo situado entre los diez primeros. Aparte de las tres victorias ya referidas, el Betis se impuso al Mallorca (3-0) y al Almería (3-1), ambos en casa, y al Espanyol en Montjuic (1-2).

Y muy mal contra los de abajo. Con unos números tan notables en los choques presuntamente más difíciles de la temporada, ¿cómo es posible que el Betis aún no haya aclarado su futuro? Una de las respuestas es obvia: los puntos que ha ganado frente a los equipos importantes se le han escapado ante los enemigos de su Liga particular, es decir, en los duelos directos. Los verdiblancos sólo se han impuesto en cuatro de los catorce enfrentamientos contra conjuntos de la mitad baja (3-2 al Getafe, 0-1 a Osasuna, 2-1 al Zaragoza y 4-0 al Murcia), pero han perdido otros seis. En resumen, 16 de 42 puntos.

A los hombres dirigidos por Chaparro les puede valer de consuelo que uno de los dos equipos a los que se les da peor este tipo de enfrentamientos es precisamente su próximo oponente, el Zaragoza, que apenas ha salido triunfador en tres de sus trece cruces contra rivales directos. El choque del próximo domingo en La Romareda, por tanto, es más final si cabe.

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