Emery, en el Sánchez-Pizjuán.
La derrota a manos del Levante ha sentado como un jarro de agua fría en el Sevilla. Perder no entraba en los planes de nadie, pese a la buena campaña del conjunto de Joaquín Caparrós, inmediato perseguidor en la tabla clasificatoria. Pero más inesperada aún ha sido esa derrota por el hecho de que el partido se disputaba en el Sánchez-Pizjuán, donde, teóricamente, los nervionenses tendrían que mostrarse más fuertes. Sin embargo, los números como local no son todo lo buenos que necesita un equipo que aspira a lograr una plaza de competición continental... y cuyo técnico, Unai Emery, llega a hablar incluso de Champions, reto que queda a 11 puntos después de la victoria del Athletic en Pamplona.
Tras los diez primeros partidos de Liga disputados como local, el Sevilla presenta un bagaje de cinco victorias (Rayo Vallecano, Almería, Osasuna, Betis y Getafe), dos empates (Málaga y Athletic) y tres derrotas (Atlético de Madrid, Celta y Levante). Ha sumado, por tanto, 17 de los 30 puntos posibles. Es decir: el 56,6%. Un porcentaje bajo para poder despedir la temporada entre los mejores. Ganar la mitad de los encuentros disputados en casa no es precisamente una buena tarjeta de presentación, y más aún cuando conjuntos como el Barcelona o el Real Madrid todavía no han visitado el estadio de Nervión.
Esos 17 puntos sumados sitúan al Sevilla séptimo en la clasificación de los equipos según su rendimimiento como local. Los seis conjuntos que tiene actualmente por delante en la tabla mejoran al nervionense jugando en casa, algo que se debe corregir cuanto antes. Los próximos rivales en Nervión serán Barcelona, Valencia y Real Sociedad.
COMPARATIVAS. Si tomanos como referencia el bagaje del Sevilla tras sus primeros diez partidos en casa, la pasada campaña sumaba tres puntos más (20). Seis victorias, dos empates y dos derrotas repartidas entre los dos técnicos que lo entrenaron durante ese periodo: Míchel primero y luego Emery (un encuentro, un triunfo).
Echando la vista un poco más atrás, el Sevilla de la temporada 2011/12 sumó 16 puntos en las diez primeras citas como local. Comenzó con mucha fuerza (cuatro triunfos de cuatro posibles) a las órdenes de Marcelino García Toral, pero de los seis partidos posteriores sólo ganó uno, perdiendo tres.
NO ES COSA DE LA LIGA. Los problemas que acusa actualmente el Sevilla en el Sánchez-Pizjuán no son exclusivos del Campeonato Nacional de Liga. Tras ganar con solvencia al Mladost Podgorica y al Slask Wroclaw, el equipo de Emery sólo volvió a lograr un triunfo en la Europa League. Fue ante el Friburgo (2-0). Luego llegarían dos tropiezos consecutivos que pusieron en duda su liderazgo en la fase de grupos del torneo continental: 1-1 frente al Slovan Liberec y 1-1 ante el Estoril. Pese a ello, el Sevilla logró su objetivo y pasó a la siguiente ronda.
No ocurrió lo mismo en la Copa del Rey. El conjunto nervionense perdió el único choque que disputó en el Sánchez-Pizjuán. El Racing de Santander, de Segunda B, también sacó provecho de su visita al estadio sevillista. Ganó 0-2 y logró el pase a la siguiente eliminatoria.
LOS MISMOS TRIUNFOS A DOMICILIO. Resumiendo: el conjunto de Emery ha disputado 16 encuentros como local en la presente campaña, de los cuales sólo ganó la mitad: ocho (cinco en Liga y tres en la Europa League), empatando cuatro y perdiendo otros cuatro (tres en el torneo doméstico y uno en el del KO). Lejos de casa, el Sevilla ha disputado 17, con un saldo de ocho victorias, seis empates y tres derrotas. Ha logrado, por tanto, idéntico número de triunfos como local que como visitante, faceta en la que ha cambiado mucho respecto a la pasada campaña. Ahora, toca mejorar en casa, y a la mayor brevedad posible.
