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Economía

El IAT lanza una bici y una minimoto eléctricas con tecnología sevillana

Los prototipos del ciclomotor eléctrico están ya y en 2015 se fabricarán. Los tres productos se basan en baterías extraíbles para recargar en casa.

el 26 nov 2014 / 13:00 h.

iat La compañía Torrot Electric Europe, cuyo principal socio es el Instituto Andaluz de Tecnología (IAT), acaba de lanzar al mercado una bicicleta eléctrica y una moto miniaturizada –de campo y para niños– también eléctrica, y en 2015 se convertirá en realidad comercial un ciclomotor eléctrico. Es una apuesta por productos de movilidad sostenible, sí, pero también la escenificación de que existe talento tecnológico de Despeñaperros para abajo: el diseño y la fabricación se ejecutan íntegramente en España y justo de lo primero –con su ingeniería incluida– ha llevado la voz cantante el IAT, que ayer en Sevilla presentó estos productos con dos ruedas y batería. Los tres proyectos se concibieron cuando ya la crisis económica hizo su aparición pero se decidió seguir pedaleando, sin temor siquiera a la creciente competencia china. Que se eligiera Sevilla para presentar una bici bautizada como City Surfer era lógico, teniendo en cuenta que aquí radica la sede del IATaunque también porque esta ciudad es modelo de movilidad sostenible, «y aquí hay mercado como también lo hay en Cádiz o Málaga». 19 kilos, aluminio, plegable, moderna. 1.300 euros su precio pero, con las subvenciones oficiales a los vehículos eléctricos, se queda en 799 euros. 50-60 kilómetros de autonomía de batería: después pedalee cuanto desee. Miguel Ángel Luque, director general del IAT, desgranó sus características, haciendo especial hincapié en el componente vital: la batería de litio que se recarga en casa (se completa en 5 horas) y que sólo activa el motor cuando queramos y de forma automática. Y ocupa como 90 centímetros. Desde que arrancara la comercialización –al finalizar el verano– se han vendido unas 200 exclusivamente on line, a través de la web de Torrot, canal low cost que será la principal salida. Para la campaña de Navidad esperan un fuerte tirón de las ventas, al igual que para la pequeña moto. Ésta, bajo nombre E10, fue diseñada para niños: pero que jueguen en el campo. Su diseño tecnológico facilita controlar a los padres la velocidad de un aparato que incluso puede alcanzar los 40 kilómetros por hora, que son los mismos que un ciclomotor. Y alrededor de 300 se han comercializado ya, con exportación incluso –hacia Latinoamérica, en especial México–. Y Papá Noel y los Reyes Magos pronto llegan. 1.399 euros en catálogo –sin ayudas para este producto–. Como llegará el año próximo MUVI, el ciclomotor, proyecto que, basado en una batería extraíble con recarga en casa –de 4 a 5 horas–, es largamente ansiado por el IAT pues lleva cuatro años de intensa investigación. Los prototipos ya están, falta que MUVI pase a su fase industrial. 50-60 kilómetros de autonomía, casco bajo el asiento y un mantenimiento fácil y un precio aún no revelado. Y competir. ¿Qué será lo siguiente? «Coches eléctricos no serán», bromeó Luque. Sí hay múltiples negociaciones para distribuir las bicis en varias regiones, en especial Andalucía. «Sevilla es una ciudad ideal». Por su parte, el subdirector general del IAT, Juan Manuel González, anticipó que el ciclomotor va a tener un precio muy competitivo en el mercado. Y competir en Europa con una bicicleta propia es complicado, pero tiempo al tiempo... La fábrica de los vehículos eléctricos se localiza en Cataluña, comunidad donde tiene su sede Torrot, sociedad en la que el IAT tiene actualmente un 13,6 por ciento del accionariado. EL DETALLE Tecnología española que sale del IAT y de un amplio grupo que pone en el mercado tres productos inusuales para la empresa andaluza y que parecen más de japonesas o chinas. Son varios millones de euros los destinados a estos proyectos –Luque no dio datos–. Una de las principales amenazas para la fabricación española de este tipo de vehículos es la competencia china –el último fabricante sevillano de motocicletas cerró el pasado verano–, si bien desde el IAT creen que será un mercado creciente en cuanto pase la crisis.

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