Cuatro estrenos absolutos, otras tantas producciones propias y una ciudada oferta musical dan forma al calendario más ambicioso que afronta el Teatro Lope de Vega en su última década. De enero a junio, la escena nacional tendrá que bajar hasta Sevilla para estar al día de lo que se cuece en las artes escénicas del país.
El Teatro Lope de Vega acogerá de enero a junio de 2008 "algunas de las mejores propuestas musicales y teatrales de los últimos años", según afirmó ayer su director, Antonio Álamo. Prueba de ello son los cuatro estrenos absolutos que constan en la programación del año próximo, el mismo número producciones propias anunciadas, o las numerosas obras de compañías nacionales e internacionales que podrán verse en Sevilla en los próximos meses en una de las temporadas más ambiciosas del Lope.
La delegada de Cultura, Maribel Montaño, declaró durante la presentación de la programación que "se ha realizado una clara apuesta por los autores contemporáneos, pero especialmente los españoles y andaluces". La música y la danza también cobran protagonismo en un programa que apuesta tanto por los valores seguros como por las propuestas más transgresoras.
La Compañía Nacional de Teatro Clásico, bajo la dirección de Eduardo Vasco, estrenará el 20 de febrero El pintor de su deshonra, una de las obras más "conmovedoras y reflexivas" de Pedro Calderón de la Barca. Del 12 al 15 de marzo, el Lope presentará en primicia la última obra del director estadounidense Bob Wilson, La mujer del mar. Una función basada en la obra de Henri Ibsen y que cuenta en su reparto con la actriz Cayetana Guillén Cuervo. Este montaje, además, es una de las coproducciones del teatro.
Els Joglars. Otro de los estrenos absolutos que acogerá el Lope en abril será el último proyecto del dramaturgo catalán Albert Boadella. Els Joglars trae a Sevilla La Cena, una mirada cruel hacia el problema del cambio climático. La pieza, que se representará del 9 al 18 de mayo, puede significar el inicio de una estrecha relación entre el escritor y el Lope, después de que éste anunciara que no volvería a actuar en Cataluña.
De la mano de un autor sevillano, David Montero, Varuma Teatro ofrecerá uno de los espectáculos más eclécticos e interesantes del panorama teatral nacional. En Los renglones imaginarios, programada para el cinco de junio, el mundo del circo se difuminará entre la danza, el teatro y los arreglos musicales operísticos.
La señorita Julia, del escritor sueco Johan A. Strindberg, cancelada la temporada anterior, será la encargada de inaugurar en enero el nuevo programa del teatro sevillano. Tras este drama centrado en la lucha de sexos y "el resentimiento social", le llegara el turno a la compañía La Zaranda. Los que ríen los últimos es el último proyecto del autor Eugenio Calonge del que Antonio Álamo dijo que "es una de las primeras plumas teatrales españolas". La obra dirigida por Paco de la Zaranda se podrá ver en el Lope los días 25 y 26 de enero.
Otra de las novedades fundamentales del programa propuesto por el Lope será la celebración de la XI edición de los Premios Max de artes escénicas. Álamo recalcó ayer que "es muy significativo que las obras con mayor número de nominaciones y los actores nominados han pasado por aquí durante el año anterior".
Filomena Marturano, de Eduardo Filippo, interpretada por Concha Velasco, y Espía a una mujer que se mata, de Veronese, estarán en cartel durante el mes de febrero. Ésta última, además, se representará en el Casino de la Exposición. En marzo, la comedia se abrirá paso de la mano de El día del padre, escrita por Ana Graciani y Gabriel Olivares y dirigido por éste último junto a García Olayo.
Del 1 al 3 de mayo, El Centro dramático Nacional, bajo la dirección de Gerardo Vera, presentarán en Sevilla El rey lear de Shakespeare. Finalmente, la popular compañía catalana La Cubana cerrará la programación del teatro con Cómeme el coco, negro.
