La Audiencia de Madrid ordenó ayer el archivo del caso de las presuntas sedaciones irregulares denunciadas de forma anónima como posibles casos de eutanasia en las urgencias de un hospital de Leganés y acordó "suprimir" toda mención a la existencia de mala praxis médica.
El auto viene a estimar el recurso de apelación interpuesto por los doctores Luis Montes y Miguel Angel López Varas contra la fundamentación jurídica del auto dictado en junio por el Juzgado de Instrucción número 7 de Madrid. Dicho juzgado acordó en junio archivar la causa abierta contra ocho facultativos y admitió que hubo una mala práctica médica en la sedación de varios pacientes.
No obstante, estableció que no podía demostrarse que dicha mala praxis fuera la causa de las muertes. Ahora, la Audiencia Provincial de Madrid, en un auto contra el que no cabe recurso, estima el recurso de apelación interpuesto por López Varas y Montes, confirmando el sobreseimiento provisional y archivo de la causa, pero acordando que se "debe tener por suprimida de su fundamentación jurídica toda mención realizada en el auto recurrido respecto a la mala praxis médica por parte de los querellados". Insiste además en que no se puede averiguar la causa del fallecimiento de los pacientes si no hay una autopsia.
Sin embargo, la Audiencia entiende que "ha sido un exceso" en el auto recurrido "tener por acreditada la mala praxis médica cuando tan sólo se han realizado averiguaciones de unos temas de gran trascendencia y sumamente controvertidos".
Todo empezó el 2 de marzo de 2005 con una denuncia anónima sobre 400 presuntos homicidios en el servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés. Días después, el consejero de Sanidad, Manuel Lamela (PP) -desde cuyo entorno se apodó a Montes como "doctor muerte"- pone en manos de la Fiscalía 25 incidencias tras recibir dos denuncias por presunta mala praxis en la administración de fármacos a enfermos terminales y eventualmente ordena el cese del coordinador del servicio de Urgencias, Luis Montes, y del gerente y el director médico del Hospital.
El caso empieza a tener relevancia social y el 19 de abril, unas 20.000 personas se manifiestaron en Madrid en apoyo a los cesados.
El procedimiento siguió su curso durante 2006 . Una comisión de expertos concluyó que en 73 casos se produjeron sedaciones "inadecuadas o no indicadas", cuatro de ellas "expresamente contraindicadas". Otro informe solicitado a la Clínica Médico Forense concluyó que no se podía establecer relación directaentre la muerte de 13 pacientes y la sedación y que jurídicamente no cabía ningún reproche penal.
Con estos informes en la mano un juzgado de Leganés abrió una causa y citó a declarar como imputados a Montes y otros cinco médicos del Hospital que fueron apartados el mes de agosto. Casi un año después, el juez concluyó que hubo mala praxis médica pero no halló relación con las muertes.
