Un juez de Sevilla ha pedido una ampliación del informe forense sobre la muerte de un bebé de 18 días del asentamiento chabolista de Tablada, aunque las últimas investigaciones indican que la menor no vivía en una chabola sino en casa de su abuela, donde dormía en el mismo colchón que sus padres.
Fuentes del caso han indicado hoy a Efe que el juzgado de instrucción 14 de Sevilla ha pedido a los forenses una ampliación de su avance de autopsia, según el cual la pequeña falleció en la madrugada del pasado día 29 por muerte súbita y parada cardiorrespiratoria.
Dicha ampliación se hará con ayuda de los datos aportados por el hospital Virgen del Rocío, adonde fue trasladada la menor por sus propios familiares.
Las últimas investigaciones apuntan a que la niña no se encontraba en el asentamiento chabolista sino que vivía con sus padres, de 18 y 17 años, acogidos en la vivienda de una abuela en la barriada de las Tres Mil Viviendas, donde los tres miembros de la familia compartían el mismo colchón.
Por ello, según adelantaron los forenses al Grupo de Menores de la Policía, es posible que la causa directa del fallecimiento del bebé fuera un golpe de calor o una sofocación, debido a las altas temperaturas que se registran estos días.
Al percatarse de la situación en que se encontraba la pequeña, sus familiares la trasladaron al Virgen del Rocío, donde los médicos certificaron su fallecimiento y el forense procedió al levantamiento del cadáver.
Tras la autopsia practicada el miércoles, el bebé fue enterrado ayer jueves.
En contra de las primeras informaciones, el bebé no se encontraba en ninguno de los asentamientos chabolistas en los que se han repartido las familias que salieron del Polígono Sur como consecuencia de un conflicto entre clanes derivado de la muerte de un chico de 17 años en un tiroteo cruzado, han añadido las citadas fuentes.
