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El juez Tirado deja lo Penal y se marcha a un juzgado administrativo

El juez Rafael Tirado, sancionado con 1.500 euros por no encarcelar a Santiago del Valle, acusado luego de la muerte de la niña Mari Luz Cortés, dejará el juzgado de lo Penal 1 de Sevilla y se incorporará al Contencioso-administrativo 3, también en Sevilla, después de que el Consejo General del Poder Judicial le haya concedido el traslado a este tribunal, que estaba vacante.

el 16 sep 2009 / 03:11 h.

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El juez Rafael Tirado, sancionado con 1.500 euros por no encarcelar a Santiago del Valle, acusado luego de la muerte de la niña Mari Luz Cortés, dejará el juzgado de lo Penal 1 de Sevilla y se incorporará al Contencioso-administrativo 3, también en Sevilla, después de que el Consejo General del Poder Judicial le haya concedido el traslado a este tribunal, que estaba vacante.

La decisión fue aprobada por la Comisión Permanente del Consejo del Poder Judicial el pasado 28 de abril y para que sea efectiva sólo está pendiente de su publicación en el Boletín Oficial del Estado, lo que ocurrirá en unos días. A partir de entonces, y al ser un traslado dentro de la misma ciudad, el magistrado tendrá ocho días para incorporarse a su nuevo destino. También deberá realizar un curso de especialización de 15 días.

El juez solicitó el traslado a este juzgado que se encuentra vacante desde el pasado abril, cuando su anterior titular, José Guillermo del Pino Romero, fue nombrado magistrado de la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. El cambio se produce después de un año en el que Tirado ha estado inmerso en un expediente sancionador por no tramitar el ingreso en prisión de Santiago del Valle. Cuando el Consejo General del Poder Judicial le impuso una sanción de 1.500 euros, el Gobierno exigió un castigo mayor e incluso solicitó reformas en el régimen disciplinario de los jueces. En paralelo, jueces y secretarios judiciales acusaban al Gobierno de utilizar esos ataques contra el magistrado para intentar tapar una situación endémica de colapso de los juzgados, que consideraban la auténtica causa del fallo de Tirado. El propio juez se consideró en uno de sus recursos un cabeza de turco e insinuó que estaba siendo objeto de una persecución con una acusación "creada de la nada".

Tras estos hechos, varios jueces de lo Penal de todo el país denunciaron que carecían de medios para solventar el atraso en sus asuntos, los más delicados al ser delitos contra las personas. Y muchos apuntaron que estaban planteándose el paso a jurisdicciones menos comprometidas, en las que los delitos se refieren al patrimonio o a los asuntos comerciales, como ha hecho ahora Tirado. La jurisdicción Contencioso-administrativa es en la actualidad la más saturada, aunque en Sevilla acaban de inaugurarse dos nuevos juzgados y se creará otro antes de final de año.

Tras estas críticas al atraso judicial, el Gobierno anunció medidas de modernización de la Justicia, incluido un registro con los condenados pendientes de que se ejecuten sus sentencias, que aún no se ha terminado de implantar en todos los juzgados. Los jueces, por su parte, tienen pendiente una huelga a finales del mes que viene por la falta de medios materiales y la sobrecarga de trabajo en sus juzgados.

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