Después de que en octubre se suspendiera el juicio de las facturas falsas de Macarena por un cambio de letrado de uno de los acusados, hoy se volverá a elegir a los componentes del nuevo jurado que enjuiciará la causa. Los tres procesados se enfrentan a penas que van desde los cinco años y tres meses a un año y cinco meses de cárcel.
Tres meses después y tras una controvertida suspensión, la Audiencia Provincial de Sevilla retoma el juicio por las facturas falsas de Macarena con la constitución hoy del nuevo jurado popular que a partir del lunes enjuiciará a los cuatro acusados por irregularidades en varias obras: el secretario del Distrito José Marín, para el que la Fiscalía pide cinco años y tres meses de prisión por los delitos de falsedad en documento mercantil y malversación de fondos públicos; el empresario José Pardo, que se enfrenta a cuatro años y tres meses de cárcel por los mismos delitos; y el colaborador del Distrito Manuel Portela, para el que el fiscal reclama un año y cinco meses como cómplice de un delito de malversación.
En octubre, el jurado se llegó a conformar, pero la sorpresa se produjo el día del juicio cuando José Marín solicitó un cambio de letrado después de que durante el fin de semana se filtrara a la prensa que su letrado estaba negociando una conformidad con las acusaciones, que consistía en pagar el dinero defraudado -20.254,62 euros- a cambio de la rebaja en la pena hasta los dos años, con lo que ninguno de los acusados pisaría la prisión. Marín dijo al inicio de la vista que no tenía confianza en su abogado y que él era inocente. Con el cambio, su letrada será Laura Sánchez, del despacho de José María del Nido, quien, según fuentes judiciales, se ha encargado personalmente de muchas gestiones.
Con este precedente es casi improbable que se llegue a una conformidad de las partes, sino que se celebrará el juicio. La suspensión del anterior supuso un coste de 2.000 euros a la Justicia, que se sumarán a los 12.000 euros que costará la nueva vista oral.
