Local

El laberinto de Monsalves

Hace no tanto tuve ocasión de ver en Verona el Museo de Castelvecchio que, como su nombre indica, está instalado en un viejo castillo, rehabilitado por Paolo Scarpa precisamente para ello.

el 14 sep 2009 / 22:24 h.

Hace no tanto tuve ocasión de ver en Verona el Museo de Castelvecchio que, como su nombre indica, está instalado en un viejo castillo, rehabilitado por Paolo Scarpa precisamente para ello. Lo he recordado ayer ante el volumen "Palacio de Monsalves", editado por la Consejería de Economía y Hacienda, que ha sacado a la luz las pinturas de Pacheco de los techos provenientes de la casa de Arguijo, las cerámicas andalusíes y las que pintara Pérez de Tudela, el derroche de Artes Aplicadas... Incluso ha descubierto las bellas combinaciones de colores en las tejas de sus tejados. Todo eso se convierte en un laberinto si lo relacionamos con la decisión de dedicarlo a segunda sede del Museo de Bellas Artes.

El palacio, un puzzle de la corriente que Guichot llamaba "estilo sevillano" y luego se llamó "regionalista", fue la "cuna del regionalismo", según Villar Movellán, o sea, la madre de todos los puzzles regionalistas. Allí no reinó la pobreza como en Altamira sino, igual que en la Casa de Pilatos, la cultura y la opulencia que ahora son patrimonio de todos. Cuidado pues con la rehabilitación: conservar el palacio en nuestros días es conservar una época a nuestra manera del mismo modo que los Sánchez-Dalp intentaron conservar otra a la suya. Verona, antes de Scarpa, tenía un viejo castillo y hoy, además de Romeo y Julieta y la Arena, uno de los mejores museos de Italia.

Antonio Zoido es escritor e historiador

  • 1