El central francés del Sevilla Julien Escudé destacó el trabajo defensivo de su equipo, imbatido en los siete últimos partidos oficiales, y ha subrayado que "es importante dejar la portería a cero porque en noventa minutos vas a tener una o dos ocasiones como mínimo".
Escudé, en conferencia de prensa, ha indicado que "si no encajas goles, por lo menos empatas", pero ha asegurado que ha sido "difícil" alcanzar este buen nivel defensivo porque "al principio de temporada había tres compañeros nuevos, como Fernando Navarro, David Prieto y Konko, pero se está viendo el trabajo táctico de los entrenamientos".
El futbolista galo también ha ensalzado la "mucha presión que hicieron" en Almería los dos delanteros, Romaric y Lautaro Acosta, "que hacen más sencillo el trabajo de la gente de atrás".
Lo cierto es que el Sevilla no está realizando un juego vistoso, aunque a Escudé ello no le inquieta ya que, recordó, eso mismo no le importaba a Fabio Capello cuando ganó, con ese mismo fútbol aparentemente deslucido, una Liga con el Real Madrid.
"Tenemos un juego bueno y marcamos goles, pese a que tenemos delanteros que, de momento, están lesionados. El año pasado se habló mucho de la defensa y de todos goles que habíamos encajado. Hemos intentado solucionar esto, llevamos siete partidos sin que nos marquen y sumando puntos y eso es muy positivo para nosotros, y para la confianza de la línea defensiva, sabiendo que los delanteros van a marcar goles, pero eso viene con los partidos", destacó.
Por lo tanto, y con el equipo segundo en Liga, el defensa francés es ambicioso a la hora de hablar de los objetivos de la temporada y reconoce que "estar arriba es bueno" y que "lucharán por estar el mayor tiempo posible" entre los tres primeros.
Julien Escudé cumplió precisamente su centenar de partidos oficiales con el Sevilla, lo que es motivo de "orgullo por estos dos años y medio muy buenos, con títulos y buenos recuerdos".
Sobre el partido del jueves ante el Stuttgart en Copa de la UEFA, Escudé ha comentado que "será difícil, porque es el primero de la liguilla y porque el rival también juega en una liga fuerte como la alemana", aunque ha aventurado que él podría quedarse en el banquillo porque "en algún momento hay que descansar, el cuerpo humano no puede jugar todos los partidos".
