Foto de familia, tomada ayer, de los responsables artísticos y técnicos del Teatro de la Maestranza y la Sinfónica de Sevilla junto a los miembros de las instituciones rectoras, colaboradores y patronos del coliseo. / Jose Luis Montero
La puesta de largo de la temporada 2014/2015 quedará marcada en la historia del Teatro de la Maestranza como la más tensa y circunspecta de todas. La abortada amenaza de una huelga de los músicos de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS) y la conocida mala valoración que un sector de los profesores tienen de la gerente, Remedios Navarro, y del director artístico, Pedro Halffter, dibujaron un ambiente poco propicio a alborozos. Esta situación ha coincidido además con el final de ciclo de ambos, cuyos cargos pueden ser renovados o no en los próximos dos meses.
Navarro aseguró que abordan esta nueva temporada con «enorme esfuerzo y ambición», tras un curso en el que se han desarrollado 172 actividades entre teatro y orquesta, se han alcanzado los 160.000 espectadores, y se ha llegado el 92 por ciento de ocupación media. Además, añadió que pese a las dificultades, la ROSS y el Teatro «resisten y con calidad», y anunció que en esta nueva temporada «se congela el precio de las entradas en taquilla», a la vez que volvió a poner sobre la mesa una vez más la necesidad de que se dé luz verde a la Ley de Mecenazago y que se baje el IVA cultural. También comentó cómo la Sinfónica «es la orquesta española con más recursos propios, un 26% de ellos, gracias a todos los patrocinadores, colaboradores y mecenas de la misma». Su intervención, como posteriormente la de Halffter, fue sellada por un largo aplauso cerrado de todos los asistentes; como respaldando la gestión actual del coliseo.
El director artístico de la ROSS y del Maestranza, Pedro Halffter, abundó en el programa operístico que de manera excepcional, y pionera en este teatro, se avanzó el pasado mes de febrero con la intención de que fuera promocionado por los tour-operadores. Destacó luego «la profunda raíz española» de Don Giovanni, que contará con el barítono malagueño Carlos Alvarez, «uno de los más importantes del mundo». «También queríamos óperas de gran repertorio y con grandes voces, necesarias para alcanzar ese 92 por ciento de ocupación media que tenemos», dijo enarbolando uno de los argumentos más fuertes que vertebran el próximo curso. De esta forma, en febrero será el turno de Norma, título de Vincenzo Bellini y obra emblemática del bel-canto que será protagonizada por Angela Meade y por Sonia Ganassi, mientras que en mayo llegará Tosca, de Giacomo Puccini, con Hui Hen, Jorge de León y Ambrogio Maestri como principales intérpretes y con seis funciones programadas. Pero no será hasta marzo cuando llegue la apuesta más importante de la temporada con el estreno en España de Doctor Atomic, de John Adams, en la que será la primera vez que una ópera de este músico llega a nuestro país y también la primera vez que el teatro acoge dentro de su temporada una ópera del siglo XXI que «plantea los problemas de este siglo y una obra que no se podría entender si antes el público no hubiera pasado por la experiencia de vivir la tetralogía de El anillo del nibelungo, que se cierra en la presente con El ocaso de los dioses que se estrena el sábado. La cuota anual de zarzuela será cubierta con la clásica La del soto del Parral, de la que Halffter señaló que «es importante y divertida». Llegará en una producción con el madrileño Teatro de la Zarzuela. Además, una vez más esta temporada tendrá cabida el ciclo de Recitales líricos, «seña de identidad del Maestranza»:la soprano Fiorenza Cedolins y el contratenor Philippe Jaroussky serán sus protagonistas. Dentro de la danza, el director artístico se refirió a propuestas «muy novedosas como la que en octubre dará a conocer el Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín, que bailará El Mesías, o el espectáculo didáctico que pondrán en escena Angel Corella y Ara Malikian, sin olvidar el habitual ballet clásico en enero, en este caso El cascanueces a cargo del Ballet Nacional de Estonia y con la Sinfónica de Sevilla en el foso del coliseo. Asimismo, Jorge Drexler, Stanley Clarke Band, Chano Domínguez y Niño Josele y Paco Ibáñez garantizarán la llegada de público heterogéneo al teatro en el marco del ciclo Grandes intérpretes, que Halffter calificó este año especialmente como «ecléctico», y el ciclo de flamenco, que acogerá el 25 de febrero una de sus funciones más importantes, un homenaje a Paco de Lucía, cuando se cumple un año de la muerte del genio. En él participarán Antonio Sánchez, Dani de Morón, José María Bandera, José María Gallardo, Juan Carlos Romero y Rafael Riqueni, entre otros. Divino tesoro, que reunirá a una amplia nómina de nombres pujantes del arte jondo, y Memoria, sobre la vivencia del flamenco en la tercera edad, completan la oferta en este ámbito. El ciclo de piano permitirá la presentación en Sevilla del polifácetico y un tanto excéntrico pianista turco Fazil Say, así como de Benjamin Grosvenor, uno de los más brillantes teclistas de su pujante generación. Más jóvenes aún, el clarinetista Pablo Barragán y el violinista Carlos Rafael Martínez Arroyo configurarán el episodio de nuevos intérpretes. El tradicional Concierto de Navidad y la habitual comparecencia de la Orquesta Joven de Andalucía completan la programación anunciada.
