El Mairena dejó escapar vivo al Olot. Foto: José Luis Baeza.
Crónica de Juan Antonio Moreno. Resultado justo visto lo visto en el Nuevo San Bartolomé. Una parte fue para cada equipo. La primera para el Mairena, aunque el Olot salió muy fuerte durante los primeros minutos, intentando imponer su estilo de juego preciosista, pero su intensidad se diluyó gracias a la firmeza táctica del Mairena y a la fiereza de sus jugadores, que desplegaron una presión acuciante sobre los garrochos.
El primer equipo en acercarse fue el gerundense por mediación de Carlos Martínez (2), pero el disparo le salió demasiado centrado al killer rojillo. Tuvo la réplica el Mairena en el 9, cuando Melchor ganó la espalda a Héctor Peña y su pase de la muerte lo desaprovechó Gabri en el primer palo, que disparó al cuerpo de Óscar. A renglón seguido, el que fuera jugador del Birmingham inglés Enric Vallés se sacó un zurdazo desde 30 metros que se topó con el poste. A partir de ahí el Olot desapareció en la faceta ofensiva hasta el gol del empate. Intentó tocar pero no pudo, y se acabó desesperando a base de pelotazos. El Mairena tenía ganado el centro del campo y no dejaba espacios para maniobrar al rival.
Mientras la tela de araña funcionaba, arriba Melchor volvía literalmente loco a Peña y le ganaba cada balón en disputa, hasta el punto que el central tuvo que ser sustituido en el descanso. Ese movimiento de ficha de Julio Bañuelos hizo mejorar enormemente a su equipo. En una de esas en las que el de El Ronquillo le ganó la espalda al 5 cedió para Babiano. El cañaílla le pega y Óscar repele, pero el balón le cae a Gabri que marca a placer el 1-0. La euforia se desató en Mairena. Tras el descanso el equipo que demostró estar más nervioso fue, sorprendentemente, el local. Varias pérdidas de balón en 10 minutos dieron orígenes a desaplicaciones defensivas alarmantes. En una de ellas, Carlos Martínez aprovechó para marcar completamente sólo y a quemarropa tras un centro chut de Francolí, que había entrado por su banda libre de oposición. El empate se celebró como si de una victoria se tratara, conocedores los gerundenses que el gol cambia y mucho el guión de la vuelta.
Desde entonces, Alonso Ramírez dio entrada a Ito en lugar de Babiano y varió su esquema inicial apostando por el gol en lugar del músculo, pero las oportunidades no llegaban. Sólo a base de balones largos y saques de esquina inquietó el cuadro alcoreño. Ito estuvo a punto de llevar a la victoria a los suyos, pero su intento de vaselina lo solventó bien Óscar, muy acertado en sus intervenciones en el día de hoy. La espadas están en todo lo alto para la vuelta.
Ficha técnica:
CD Mairena: Nico, Llano (José Carlos, m. 59), Gago, Weto, Chía, Jesús Rubio, Babiano (Ito, m. 77), Fito, Paquito, Gabri y Melchor.
UE Olot: Óscar, Freixa, Serra, Peña (Cristino, m. 46), Hostench, Francolí, Roger, Abel, Vallés (Raúl Rodríguez, m. 41), Carlos Martínez y Uri (Roca, 87).
Goles: 1-0, m. 39: Gabri; 1-1, m. 61: Carlos Martínez.
Árbitro: Bote González (Extremadura). Amonestó al local Babiano y al visitante Peña.
Incidencias: 1.200 espectadores en el Nuevo San Bartolomé.
