Carretera Amarilla requiere una reforma desde hace años.
El plan integral de reforma de los polígonos industriales de la ciudad afrontará a partir de este año una de sus grandes asignaturas pendientes. En los últimos meses, siete grandes parques empresariales han sido objeto de obras de reforma impulsadas por la Delegación de Economía y Empleo y financiadas bien por el Ayuntamiento, bien por el plan de inversión estatal.
Pero faltaban dos, los más grandes de la ciudad y, en consecuencia, los dos proyectos de mayor envergadura. Uno de ellos, Carretera Amarilla, arrancará finalmente este año un periodo de obras que durará varios ejercicios. El otro, Store, aún deberá esperar hasta que se defina si la Junta activa o no otro plan de inversión autonómico.
Han sido los propios empresarios los que plantearon este orden de prioridades como explicaron tanto desde la Delegación de Empleo como desde la asociación de parques industriales.
Carretera Amarilla es el parque más grande de la ciudad, con casi 400 empresas instaladas, y se encuentra en un avanzado estado de deterioro. Sevilla Global, organismo dirigido por IU, tiene ya diseñada su hoja de ruta desde hace años a la espera de una financiación que llegará finalmente en este ejercicio, según confirmaron desde la Delegación.
La intervención costará unos diez millones de euros y se ejecutará en dos fases. La primera arrancará este año con una partida municipal de un millón que servirá para iniciar los trabajos. Los cuatro restantes quedan comprometidos para 2011. La segunda fase, de otros 5 millones, se ejecutaría a continuación.
En la primera fase, el área de Empleo, dirigida por Carlos Vázquez, tendrá dinero suficiente para realizar una reordenación de ocho de las calles del parque industrial -Prensa, Industrial, Transporte, Ahorro, Zacarías Zulategui, Comercio, José Maria Ibarra y Gómez Rull-.
En todas ellas, según el proyecto de obras, se ampliarán aceras, se reestructurarán aparcamientos, se remodelarán las instalaciones de agua y luz, se implantarán zonas verdes, se revisará el mobiliario urbano y se instalará una nueva red de carriles bici que atravesará todo el polígono industrial.
"Tenía más sentido que éste fuera el primero porque requiere de una mayor inversión y necesitaba con más urgencia las mejoras", explicó Antonio López Valbuena, presidente de la asociación de polígonos industriales de Sevilla.
Para una siguiente fase queda así el polígono industrial Store, también con más de 300 empresas instaladas. El proyecto de obras, cuantificado en cinco millones de euros, está a la espera de que se apruebe un nuevo Proteja. De no ser así tendrá que aguardar otro ejercicio en el que el Ayuntamiento tenga una mayor capacidad inversora.
Mientras tanto IU sí ha adquirido un compromiso provisional: a través del área de Infraestructuras para la Sostenibilidad se ejecutarán obras menores de reparación del asfalto muy dañado tras las últimas lluvias.
Tanto Carretera Amarilla como Store se quedaron a última hora fuera de los planes extraordinarios de inversiones del Estado. Con el primero, el Plan 8.000, se pudo actuar en media docena de polígonos, a los que se añadió Calonge, con financiación municipal.
Esto permitió que siete áreas industriales, con más de 1.000 empresas instaladas fueran objeto de distintas obras de mejora, de las que sólo están pendientes trabajos -en buena medida por los retrasos producidos debido a las lluvias-, en El Pino, Tablada y Calonge.
En el segundo plan estatal, el Plan 5.000, se optó por no introducir iniciativas que pudieran causar molestias en la vía públicas. Y las reformas de los polígonos industriales restantes quedaron aparcados. No son los únicos. La asociación de polígonos reclama desde hace años la reforma de Chaparrilla.