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El mayor premio de la ONCE deja en Triana más de once millones

Nunca antes un vendedor de cupones sevillano había repartido tal cantidad de dinero. Miguel Bermúdez Aragón, apodado en Triana como el Gato, vendió el viernes 60 cupones del número premiado en su punto de venta del Altozano.

el 15 sep 2009 / 22:40 h.

Nunca antes un vendedor de cupones sevillano había repartido tal cantidad de dinero. Miguel Bermúdez Aragón, apodado en Triana como el Gato, vendió el viernes 60 cupones del número premiado en su punto de venta del Altozano. En total, repartió 11.295.000 euros. Ayer se fue al Rocío a celebrarlo.

"Mi mujer me ha dicho de todo, menos bonito. Tuve cuatro cupones del número premiado en el bolsillo y, al final, los vendí en el bar El Ventura, en la calle Adriano". A pesar de que la suerte, después de tenerla entre las manos, le ha sido esquiva, Miguel Bermúdez era ayer un hombre feliz. "Aquí nos hemos venido al Rocío a pasar el fin de semana y a celebrarlo". El viernes repartió más de 11 millones en Triana en el que constituye el mayor premio distribuido jamás por la ONCE en Sevilla y el segundo premio más grande en Andalucía, después de los más de doce millones de euros repartidos en Montilla (Córdoba) en el sorteo extraordinario del padre, en marzo de 2007, en el que un afortunado ganó diez millones al contado más 6.000 euros al mes durante 25 años, mientras que otros nueve afortunados ganaron 25.000 euros cada uno.

Apodado en Triana como el Gato, por su felino color de ojos, Miguel Bermúdez, de 48 años, es vendedor de la ONCE desde 1999. En el arrabal es un personaje muy conocido, ya que, además de integrante fundador de la cuadrilla de costaleros hermanos del Cristo de las Tres Caídas, Bermúdez ocupó el cargo de prioste en la hermandad del Rocío de Triana siendo entonces hermano mayor Julio Aguado.

Antes de dedicarse a repartir la suerte, el Gato era monitor de natación hasta que un accidente de tráfico le dejó sólo con una pierna. "Fue entonces cuando me dediqué a dar clases de natación a niños con problemas de espina bífida y síndrome de down, y luego a nadadores invidentes, a través de los cuales me metí en la ONCE". Desde entonces, tiene su punto de venta en la calle San Jacinto, esquina con Pureza.

"Muy repartido". En total, Bermúdez vendió el viernes 60 cupones del número 45.208: el de la serie del Cuponazo, dotado con nueve millones de euros, dos premios de 150.000 euros (a las cinco cifras y series adicionales) y 57 cupones agraciados con 35.000 euros cada uno (a las cinco cifras).

Bermúdez asegura que los premios están "muy repartidos", ya que además de repartir una buena parte de los cupones premiados en la plaza del Altozano, también colocó otros 20 cupones del número agraciado en el bar La Fresquita, de la calle Mateos Gago, y otros tantos en el bar Los Príncipes, en la calle Arfe.

El Gato conoce personalmente a la persona agraciada con los nueve millones de euros del cuponazo, ya que se trata de "un amigo mío", cuya identidad, lógicamente, no quiere desvelar. "Me ha llamado por teléfono y lo único que me ha dicho es gracias, gracias, gracias, y que ya hablaremos el lunes".

Aparte del ya poseedor de los nueve millones de euros, Bermúdez conoce, al menos, a otras dos personas agraciadas con premios de 150.000 euros. "Son también amigos míos, conocidos del mundo cofrade".

Todos le telefonearon ayer para mostrar su agradecimiento por este "pelotazo", aunque, de momento, no consta que ninguno de ellos se haya comprometido a compartir con el vendedor de cupones su felicidad. "Todavía no me han dicho nada. Todo el mundo está muy nervioso. Imagino que algún regalillo caerá".

Después de convertirse en el vendedor de cupones más célebre de Sevilla, Miguel Bermúdez optó ayer por "quitarse de en medio" e ir a celebrar a la aldea de El Rocío con su familia y amigos la feliz noticia.

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