“Si no lo tienes, no te sientes el mejor”. La frase, pronunciada en su día por el campeonísimo Paul Tergat, fue rescatada por Fernando Rodríguez Villalobos, presidente de la Diputación Provincial de Sevilla, durante la presentación del XXVIII Cross de Itálica.
Una edición de 2010 que volverá a tener un cartel de campanillas, personificado en esta ocasión en el duelo que librarán sobre las ruinas del recinto arqueológico el vigente campeón del mundo, el etíope Gebre Gebremariam, y el europeo, su compatriota nacionalizado español Alemayehu Bezabeh. Los mejores en el mejor cross.
Y es que la cita de Santiponce vuelve a presentar una inscripción –unos sesenta atletas en la prueba de élite– que es la envidia de las competiciones de campo a través de todo el planeta, a pesar de que la maldición de Trajano se ha llevado por delante al ugandés Moses Kipsiro, vencedor los dos últimos años y, por tanto, aspirante a la triple corona consecutiva que nadie ha conquistado (Kenenisa Bekele sí ha sumado tres triunfos, aunque no seguidos).
Kipsiro se cae del cartel por lesión y tratarán de sucederle los citados Gebremariam y Bezabeh, pero también otro etíope, Ayele Abshiro, y la armada keniana que lideran Leonard Komon, Mark Kiptoo, Mike Kipyego, etc.
Gebremariam, flamante vencedor en Atapuerca y Soria, declaró estar “encantado de correr en Itálica” antes de señalar las diferencias con el Mundial: “Un mundial requiere más meses de preparación y aquí el número de rivales será menor, pero evidentemente ganar este cross será muy difícil”.
Alemayehu Bezabeh, que hizo historia para el atletismo español en la cita continental de Dublín, recalcó que “nunca he corrido en Sevilla –Chema Martínez intervino entonces para explicar que le ha aleccionado sobre el circuito durante el viaje en tren y dejar claro que llega “muy fuerte”–, pero supongo que será casi como un mundial porque hay mucha gente rápida”.
Bezabeh añadió que Itálica le servirá también para preparar el Campeonato de España y el Mundial en Polonia.
La carrera femenina no será menos apasionante, teniendo a las kenianas, portuguesas y rusas como favoritas. Rosa Morató, subcampeona europea, defenderá el pabellón nacional: “Hace tres años que no participo y vengo con mucha ilusión”, dijo la catalana.
