El alcalde de Marchena, Juan Antonio Zambrano (PSOE), no puede más, está cansado de la situación financiera que sufre su Consistorio y de que ni en la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), presidida por el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano (PSOE); ni en la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), liderada por el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna (PP), estén haciendo algo para "hacer ver al Estado lo mal que están los ayuntamientos". A esta queja se une que ninguna de estas dos entidades pone en marcha medidas que puedan salvar a los ayuntamientos españoles, según denunció ayer Zambrano.
Ante esta situación, ha decidido dar un paso al frente y llevar al pleno de septiembre la propuesta de la baja temporal tanto de la FEMP como de la FAMP, "porque no se dan cuenta de lo mal que lo estamos pasando los alcaldes, que carecemos de recursos económicos y sufrimos una fuerte presión social".
Zambrano, que gobierna en minoría con ocho concejales, frente a los cuatro del PP, cuatro del PA y uno de IU, espera contar con el respaldo del resto de formaciones para solicitar esta baja, una propuesta que expondrá al resto de ayuntamientos para que se sumen a la medida de protesta.
El regidor de Marchena explicó que cuando se reúne con otros alcaldes "todos hablamos de los problemas económicos que tenemos, por lo que finalmente he decido pedir el cese de estos dos organismos, porque ni atienden nuestras peticiones ni tienen en cuenta las propuestas que presentamos para solucionar el problema".
Para Zambrano es imprescindible que se amplíe el plazo de amortización de los préstamos a proveedores, "porque no es de recibo que a la Administración local se le exija que devuelva los préstamos en tres años al 6,5% y a las entidades financieras a 15 años y al 3% de interés".
Además, reclama que los préstamos del plan de pago a proveedores tengan el mismo trato que el que se les ha dado a los bancos, porque recuerda que se firmó a un interés del 5,93%, "pero al ser revisable en la actualidad rondaría el 8,35%, algo que no podemos soportar".
Asimismo, pide que no se reduzca la participación local en los impuestos del Estado ni en las comunidades autónomas y que se amplíe el periodo de pago de los aplazamientos de las deudas con la Seguridad Social y Hacienda a 15 años, como a las entidades financieras.
A estas peticiones, el alcalde de Marchena suma que la Junta de Andalucía y el Gobierno central no se demoren en los pagos, "porque tenemos que pedir dinero por adelantado y eso nos trae más gastos, por ello necesitamos un calendario urgente de pagos".
Finalmente, Zambrano exige un plan de empleo para paliar la situación de los ciudadanos. "Estas reclamaciones están más que justificadas", dijo el alcalde, pero ni la FEMP ni la FAMP han hecho nada para trasladarlas hasta el Gobierno central.