La última junta de gobierno local del Ayuntamiento de Dos Hermanas aprobó el inicio de los trabajos para la construcción del tanque de tormentas que se ubicará bajo los aparcamientos situados frente a la portada de la Feria nazarena, obras que el pasado 26 de enero fueron adjudicadas por Emasesa. Ahora sólo falta que la empresa adjudicataria -UTE formada por Dragados, Contrat y Movicontex- se ponga manos a la obra para iniciar los trabajos, previsto para el segundo trimestre, y cuyo plazo de ejecución es de 24 meses.
El concejal de Obras y Hacienda del Ayuntamiento de Dos Hermanas, Francisco Rodríguez, indicó que el presupuesto final asciende a 13,06 millones de euros, e incluye tanto el depósito como los dos colectores que vertirán sus aguas al mismo y que "vendrán a subsanar las deficiencias de saneamiento de las redes de toda esta zona".
El depósito subterráneo, dividido en dos senos, tendrá una longitud de 121 x 47,8 metros y una capacidad de 35.000 metros cúbicos de agua, seis veces mayor del que funciona desde 2007 en Los Montecillos y que tiene el mismo sistema de depósitos, calles y turbas de limpieza que el nuevo. El interior del tanque tendrá 20 calles, 10 por seno, lo que va a permitir que el mantenimiento y la limpieza se pueda hacer por calles y que, si no fuera necesario por la intensidad de las lluvias, solo se ocupara uno de los dos depósitos.
Las obras incluyen dos colectores de saneamiento nuevos por los que está previsto que comiencen los trabajos, con lo que su incidencia en el solar situado frente a Recreo San José, donde irá el depósito, no será inminente y no incidirá en la feria de este año, aseguró Rodríguez. El colector Parque Central, que viene de Cantalgallo hasta el final de la calle Guitarra de la feria, en paralelo al cerramiento del ferrocarril y que hoy tiene 600 metros, se va a anular y se va a ejecutar uno nuevo de dos metros de diámetro. Y el segundo vendrá de la calle Genil, en Vistazul, y tendrá un diámetro de 1,8 metros. "Además de los dos colectores principales habrá diversas actuaciones para dar salida al agua recogida en superficie", apuntó el edil.
Además se construirá un edificio que alojará la sala de control, el acceso de personal al interior del depósito, un centro de transformación propio y un grupo electrógeno para que no se interrumpa el funcionamiento en caso de corte de luz, al igual que existe en Los Montecillos.
En cuanto a la parcela, Francisco Rodríguez afirmó que, al concluir los trabajos, "se van a llevar a cabo obras de urbanización que garantizarán la recuperación de los servicios actuales". Así, señaló que al comenzar los trabajos por los colectores no afectará a los aparcamientos este año y aún no hay un espacio definido para que se traslade el mercadillo de los miércoles, que negociará la concejal de mercado, Rosa Roldán, con los afectados. Y en años posteriores, la zona en obras se vallará para que el resto se pueda utilizar tanto para aparcamientos como para los puestos que durante la Feria se ubican en esta parcela.
Inversión. El nuevo tanque de tormentas se enmarca dentro de las actuaciones que Emasesa está llevando a cabo en Dos Hermanas tras el convenio suscrito con el Ayuntamiento a raíz de la cesión en 2008 de la gestión de la red de saneamiento a la empresa metropolitana de aguas.
Alejandro Prats, jefe de la división de áreas territoriales, y Luis Miguel Sáenz, jefe del área territorial de Dos Hermanas, que ayer dirigieron una visita guiada al depósito de Los Montecillos como muestra de lo que se va a hacer en Recreo San José, indicaban ayer que, tras el estudio realizado a la cuenca, se vio que eran necesaria una inversión de 50 millones de euros en el municipio, debido al crecimiento que la ciudad ha vivido en las últimas décadas y del que el nuevo tanque es un punto más, aunque supone una fuerte inversión.
En los últimos años se está llevando a cabo la sustitución de colectores en distintas calles del centro, el último concluido en el entorno del mercado de abastos, porque se han quedado pequeños.
El tanque de tormentas de Los Montecillos, ubicado en la plaza Félix Rodríguez de la Fuente, está en servicio desde 2007. Tiene una capacidad de 6.000 metros cúbicos y fue el primero de este tipo construido en Andalucía, modelo ya seguido en Cataluña y Levante por su idoneidad para las lluvias torrenciales.