Jugar de delantero centro en la selección nacional de Brasil, ser indiscutible con la constelación de delanteros-estrellas del fútbol brasileño no debe ser ninguna tontería. Cualquier entrenador, de cualquier equipo del mundo, suspiraría por tener en su equipo un delantero alineado con el gol y que firma un número considerabilísimo todas las temporadas.
Por ello, más de una vez, junto con mis compañeros, nos hemos abonado a esa teoría que Luis Fabiano, el '9' de Brasil debe ser "sí o sí" un fijo en las alineaciones, salvo lesiones o expulsiones. Decir esto no es estar en contra de nadie. Quien tenga una mente confusa y obtusa así puede creerlo en esa defensa ultramontana fatua y absurda de unos intereses que habitualmente no son los suyos. De momento sigue goleando y, posiblemente, sea el jugador con mejor mercado entre los jugadores que militan en el Sevilla. Su escaparate es goloso y a las moscas le gustan los muy buenos dulces.
