La crisis se está llevando por delante a las empresas españolas a tal velocidad que su número se ha reducido por primera vez en nueve años. Casi el 2% las firmas sucumbió en 2008 a la caída del consumo y la mayoría de los que no lo han hecho apuestan por un modelo con pocos o ningún empleado.
En concreto, el número de empresas disminuyó un 1,9% durante el año pasado y se situó en 3.355.830, según la última actualización del Directorio Central de Empresas (Dirce) en enero de 2009, recogido por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Como no podía ser de otra manera, la peor parte se la llevó el sector de la construcción, al sufrir un recorte del 11,8% de sus empresas respecto al año anterior y quedarse con 441.956. Así, el ladrillo pasó de representar el 14,6% del conjunto empresarial al 13,2% en la actualidad.
El comercio fue el segundo sector herido por la coyuntura económica. Según el Dirce, experimentó un retroceso del 1,5%, al contabilizar, a día de hoy, 830.811 empresas. No obstante, dicha reducción no mermó en exceso su peso en la economía, que se sitúa en el 24,8%, frente al 24,6% de 2008.
Por contra, el sector servicios se salvó de la quema y logró aumentar en un 0,4% el número de sus empresas, que sumaban 1,83 millones, esto es el 54,8% de la actividad y 1,2 puntos porcentuales más que en el año pasado.
Las industriales, por su parte, no sienten frío ni calor y representaban al 7,3% del tejido empresarial, manteniéndose prácticamente igual que el año anterior.
El deterioro provocado por la crisis hizo que las empresas con un número muy reducido de asalariados proliferen aún más. En este sentido, destaca que el 52,7% de las firmas -1,7 millones- no emplea a ningún trabajador. A lo que se suma que el 27,4% -otras 919.092- tienen entre uno y dos trabajadores. Así, resulta que ocho de cada 10 firmas tienen dos o menos asalariados, mientras que las plantillas con 20 o más empleados apenas se dan en el 5,3% de las empresas.
Por comunidades autónomas, Andalucía fue la más afectada por la destrucción de empresas, al disminuir en un 2,4% su censo respecto al año anterior. Le siguen Cataluña y la Comunidad de Madrid, con mermas del 1,4%. En conjunto, las tres regiones siguieron acogiendo más de la mitad de la actividad empresarial a nivel nacional.
