Si eran 180 las personas a las que atendía este colectivo local a finales de 2008, actualmente son 400 las que precisan de la ayuda que prestan los integrantes de la entidad solidaria y que, hoy día, solicitan acogerse al reparto de productos alimenticios que realizan gracias al trabajo conjunto con el Banco de Alimentos de Sevilla. Este importante incremento se ha producido tras "haberse terminado las prestaciones que recibían muchos ciudadanos, por lo que ahora hay numerosas familias que no tienen apenas nada, y hay otros vecinos que cobran 400 euros y con ese dinero no puede funcionar una casa", explicó la vicepresidenta de Vopan, Ana María Valdivieso.
Fundamentalmente, los demandantes de ayudas son núcleos familiares, "que antes incluso tenían buenos trabajos y nunca han necesitado ayuda, pero que ahora se ven sin nada que llevarse a la boca". También las personas mayores forman parte importante de los demandantes, ya que "disponen de una pequeña pensión y tienen que ayudar a sus hijos porque se han quedado sin trabajo".
Otro foco de atención lo protagonizan las personas separadas o divorciadas, sobre todo mujeres, que han sufrido una merma importante en sus ingresos y que tienen hijos a su cargo. Pero "lo más alarmante es que la media de edad de muchas de las personas que vienen a Vopan no sobrepasa los 40 años, y con niños pequeños o en edad escolar, de ahí que tratemos siempre de tener disponibles papillas y alimentos para ellos".
Habituada a conocer casos complicados y vivencias de muchos ciudadanos, Valdivieso reconoció que existen "auténticos dramas", y que incluso "hay gente que espera desde la madrugada a las puertas de la sede para que nosotros podamos atenderle".
Según explicó, cada tres meses llega a Utrera el camión del Banco de Alimentos, ya que Vopan sólo recibe reservas por parte de este organismo. A partir de ahí, los voluntarios se encargan de gestionar el reparto, siempre a personas que puedan acreditar a través de documentos que no están recibiendo ningún sueldo ni son beneficiarios de ninguna prestación social. Los artículos que se entregan son de primera necesidad y no perecederos, principalmente, leche, arroz, lácteos -quesos, batidos...-, azúcar, galletas y pasta, e incluso productos para los niños, como leche infantil o cereales. "La verdad es que éste es un momento complicado, ya que hay muchas personas que no están acostumbradas a pedir ayuda y, por una mala racha, se han visto obligadas a venir a nuestra sede, y lo cierto es que lo pasan mal", afirmó Valdivieso, quien señaló que "sabemos de la existencia en Utrera de muchas personas que están muy necesitadas pero, al no estar acostumbradas, les cuesta mucho trabajo venir a pedir ayuda".
Ante esta situación, la portavoz de la entidad local hizo un llamamiento a la solidaridad "de la gente y de las empresas que tienen productos de sobra, para que se les reblandezca el corazón y colaboren". Vopan es una asociación integrada por unas 30 personas, que lleva trabajando desde hace seis años en el municipio y que ha colaborado en proyectos tan diversos como la limpieza y reforestación de zonas verdes y, en los últimos años, en la atención a personas con escasos recursos.
