Antonio del Castillo mostró ayer públicamente su indignación contra el juez de instrucción número 4 que investiga la causa de la desaparición de su hija Marta y arremetió también contra el fiscal, al que acusó de no hacer su trabajo, para lo que utilizó la red social Twitter.
Nos ha tocado una fiscalía de los que les gustan estar ociosos por los pasillos. Era el primer mensaje del progenitor de Marta del Castillo, que mostraba así su malestar por la postura del fiscal del caso, que no da crédito alguno a la séptima versión aportada por Miguel Carcaño sobre cómo murió Marta y dónde se halla enterrado el cuerpo. Tal es la indignación, que sus mensajes mostraron una elevación del tono de la crítica, dirigida en esta ocasión hacia María José Segarra, fiscal jefe de Sevilla. Qué opina la jefa de los fiscales de Sevilla? Señora Segarra hable con la policía, por favor haga su trabajo. Su sueldo lo pagamos todos.
Pero el malestar no solo se limitó al ámbito de la Fiscalía, también lo canalizó de forma manifiesta y bastante explícita hacia el juez encargado del caso con mensajes como éste: Qué pena que éste no hubiese entrado a reparto y nos hubiese tocado la juez Alaya. Personas con ganas de trabajar siempre buscando la verdad.
La razón es que el magistrado sopesa dar carpetazo a la investigación y decretar su archivo sin buscar en la finca de La Rinconada donde ahora dice Miguel que enterraron a Marta.
A principios de semana, Miguel ratificó ante el juez su séptima versión diferente de lo que ocurrió el 24 de enero de 2009, que ya dio a la Policía el pasado mes de octubre y de cuyo guión no se salió lo más mínimo. En ella cuenta que fue su hermano Javier el que mató a Marta de un golpe en la cabeza con la culata de una pistola tras meterse en una discusión entre los hermanos a cuenta del dinero de la hipoteca y que fue él también quien condujo el coche que trasladó el cuerpo de la joven hasta un punto que no concreta en una finca del término municipal de La Rinconada.
El fiscal no le realizó ninguna pregunta a Carcaño porque no otorga ninguna credibilidad a esta nueva versión que ha ofrecido cuatro años después de entrar en prisión.
Apenas un día después, Javier Delgado, hermano de Miguel, acudía a declarar ante el juez tras ser imputado ante el nuevo giro del caso. Sin embargo, en cuestión de diez minutos negó una por una las acusaciones que Carcaño había vertido sobre él y las atribuyó a la falta de comunicación y de relación que han mantenido desde la entrada en prisión del joven para cumplir una pena de 21 años de cárcel por asesinato, puesto que desde entonces no se habían visto.
Al carecer de pruebas que sustenten el enésimo relato de los hechos de Miguel y ante la declaración de Delgado, la Fiscalía manifestó su intención de no pedir ninguna indagación más, después de que también optara el fiscal por no realizar ninguna pregunta al hermano de Carcaño.
Delgado ya ha sido absuelto por dos tribunales de haber colaborado con su hermano para ocultar el cuerpo de Marta. Sin embargo, los padres de la joven se muestran convencidos de la participación de éste en los hechos.
El juzgado de instrucción número 4, no obstante, mantiene abierta una pieza separada relativa a la búsqueda del cuerpo de Marta que es totalmente independiente y permitirá continuar con la investigación.
