El Palmar de Troya se encuentra a más de 13 kilómetros del núcleo urbano de Utrera. Foto: Salvador Criado
Tras venir rondando desde hace más de una década, en septiembre de 2012 se ponía sobre la mesa la posibilidad de iniciar los trámites oportunos para solicitar la segregación de El Palmar de Troya con respecto a su municipio matriz, Utrera. Desde entonces, se han dado varios pasos para llegar a la recta final de un proceso que debe resolver la Junta de Andalucía. Primero fue la junta vecinal de la Entidad Local Autónoma (ELA) la que, por unanimidad, aprobó esta propuesta. Desde ahí pasó al Ayuntamiento de Utrera, cuyo pleno municipal también dio luz verde al procedimiento. A partir de entonces, y tras constituirse la comisión técnica de seguimiento, se realizó un estudio sobre El Palmar, donde se plasmó un informe económico-financiero, otro de tipo jurídico, se indicó la planimetría del nuevo municipio, se habló de los servicios que debería prestar esta población,
En diciembre de 2013, toda la documentación llegaba a la administración regional, cuyo Consejo de Gobierno tendrá la última palabra. El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía ha publicado recientemente el anuncio de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales en torno al futuro de la ELA utrerana. A ello se une la aparición en el Boletín Oficial de la Provincia, así como en los tablones de anuncios y sedes electrónicas del Ayuntamiento de Utrera. Una vez publicados, el plazo de alegaciones está a disposición de los interesados a lo largo de un mes.
En este sentido, UPyD ha anunciado que, en próximos días, presentará las correspondientes alegaciones a este proceso. Esta formación política fue la única que, en el pleno municipal, rechazó la segregación de El Palmar de Troya, mientras que el resto de la corporación (PSOE, PA, PP e IU) la respaldó.
UPyD considera que «no es el momento político ni económico para plantear la segregación, sino todo lo contrario, con lo que poder ofrecer unos servicios eficientes a los ciudadanos». Además, recuerda que faltan servicios en la ELA, necesarios para lograr la independencia municipal de El Palmar, como contar con un cementerio.
En su día, PSOE e IU señalaron que la propuesta del Gobierno central de suprimir las entidades locales autónomas llevaba a un «callejón sin salida» a El Palmar de Troya, aunque IU propuso la celebración de un referéndum para que los propios ciudadanos respalden la segregación de la ELA con respecto al municipio utrerano. Por su parte, el PA recordó que existen pueblos en la provincia de Sevilla «con menos habitantes, y teniendo otros Ayuntamientos más cercanos que la distancia que hay entre Utrera y El Palmar», que supera los 13 kilómetros. El PP también se mostró de acuerdo «porque es lo que quieren los vecinos de El Palmar».
Algo que preocupaba era que, si se descuenta el número de habitantes de El Palmar en torno a 2.400, Utrera vería reducida su población por debajo de los 50.000 habitantes. Esto traería consigo un descenso en los ingresos, de en torno a un millón de euros anuales, procedentes de la transferencia por parte del Estado y de la Junta de Andalucía. Frente a esto, el alcalde utrerano, Francisco Jiménez, comentó que el Ayuntamiento trasfiere a la ELA unos 800.000 euros anuales, al tiempo que la disminución de los habitantes supondría un millón de euros menos. Sin embargo, señaló que la población seguirá aumentando por lo que esta situación se mantendría pocos años, con lo que se recuperarían los ingresos actuales, mientras que la transferencia a la ELA se mantendría de no segregarse.
