Sentado, en una actitud de escucha y comprensión y con una edad que podría corresponder a a la de su segunda visita a Sevilla, allá por el año 1993. En un apacible taller de Espartinas, el imaginero José Antonio Navarro Arteaga ultima la imagen del beato Juan Pablo II a tamaño natural que será entronizada en la capilla de la Estrella el próximo mes de septiembre.
Será la primera imagen de bulto redondo del Papa polaco que se exponga a la veneración de los fieles en un templo de la Archidiócesis de Sevilla. Tallada en madera de cedro, la escultura representa a Karol Wojtyla en actitud sedente, revestido de pontífice, con la sotana blanca, la muceta roja y la estola denominada "de los evangelistas".
Con el pie derecho algo adelantado sobre el izquierdo, el artista ha dotado a la imagen del Pontífice de una pose idéntica a la del "juego de pies" del Cristo de las Penas, en un claro "guiño" a la hermandad trianera.
Para captar ese gesto de infinita bondad grabado en el rostro del Papa polaco, además de documentarse con decenas de fotografías, Navarro Arteaga también ha buceado en los numerosos escritos y documentos que el Pontífice legó a la posteridad. "Es importante conocer a la persona y en este caso me he dejado imbuir con las lecturas de sus encíclicas, en especial de la carta que Juan Pablo II dirigió a los artistas", explica.
El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, será el encargado de bendecir en septiembre la imagen del nuevo beato. Manuel Domínguez del Barco, hermano mayor de la Estrella, explica que, sin entorpecer la visión de la Estrella, la talla sedente del Papa polaco ocupará un pequeño altar ubicado en el testero derecho de la capilla, frente a la pequeña tienda de recuerdos.
"No era muy aconsejable que en una capilla de tan reducidas dimensiones metiéramos una imagen de talla completa de pie, de ahí que pensáramos en la posibilidad de sentarlo para que no perjudicara el resto del hábitat de la capilla", aclara el artista Navarro Arteaga, quien ya realizara también para la hermandad del Gran Poder la imagen del beato Marcelo Spínola que se venera en la Basilica de la plaza de San Lorenzo.
