Igor Mitoraj en la Plaza Nueva, Manolo Valdés en la Alameda, Baltasar Lobo en los alrededores de la Alfalfa y Auguste Rodin también en el entorno de la Plaza Nueva. Obras de este escultor romántico, como El Pensador, de las más relevantes de la historia, vendrán a Sevilla a final de año. Arte del mejor, para todos.
Hace más de una década que algunas piezas de Rodin se pudieron disfrutar en el Museo de Bellas Artes hispalense, alguna de ellas incluso se instaló en su patio. Sin embargo, faltaron muchas, como su famosísimo y alabado El pensador. Como regalo de Reyes, los sevillanos podrán verlo en la Plaza Nueva -frente al Ayuntamiento- la próxima Navidad.
Ante el buen resultado de las últimas exposiciones instaladas en plazas del Centro de Sevilla, el Ayuntamiento ha solicitado a la Fundación La Caixa que traiga a la capital andaluza la muestra de Auguste Rodin (París, 1840-Meudon, 1917) cedida temporalmente por el Museo Rodin de París. Esculturas tan relevantes como El Pensador se encuentran ahora en la plaza Fuente de las Batallas de Granada, escenario que ha relevado a Palma de Mallorca y Málaga. La muestra dejará suelo granadino el 23 de marzo, irá a Valladolid y, después, regresará al museo parisino. La intención del Consistorio es que en las próximas navidades se pueda ver en la Plaza Nueva e incluso en la de San Francisco. Aún no hay fecha concreta.
La joya de esta exposición al aire libre es El pensador, una de las obras más representativas del arte universal. No obstante, no será la única maravilla a observar. Le acompañará, entre otras, Los burgueses de Calais, inspirada en los burgomaestres, unos personajes de la ciudad francesa de Calais que durante la Guerra de los Cien años se entregaron y se ofrecieron en sacrificio a Eduardo de Inglaterra, convencidos de que así salvarían la ciudad. La seguridad será clave para evitar cualquier daño a las piezas.
Según el Consistorio, esta exposición supondrá "un hito en la ciudad", ya que será la primera vez que puedan verse al aire libre en Sevilla estas famosas esculturas, cuyo desembarco se realizará gracias a la colaboración con la Fundación La Caixa, con la que Sevilla ya ha podido disfrutar de las esculturas de Igor Mitoraj y de Manolo Valdés. La primera muestra coincidió con el reestreno de la Plaza Nueva y, la segunda, con la reapertura de la Alameda.
El objetivo es sacar el arte de los museos y provocar un diálogo con la arquitectura. Nunca mejor dicho en el caso de Rodin, quien concibió sus esculturas para ser expuestas al aire libre.
